El Gobierno argentino profundizó hoy su campaña contra el dengue, para evitar que el movimiento turístico durante la Semana Santa lleve a una proliferación de la enfermedad que cada día afecta a más personas.
Mientras que las cifras difundidas por la prensa argentina aseguraban hoy de hay hasta 10 muertos por dengue y unos 14.500 infectados, oficialmente se reconocen alrededor de la mitad. La enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti alcanzó el nivel de epidemia en dos provincias norteñas del país, Chaco y Catamarca, pero su avance afecta a la mayoría de las provincias argentinas, incluyendo a la capital.
Esta situación es inédita en la región durante los últimos años, por brotes en Bolivia, Paraguay y Brasil. Ante el temor de que el movimiento turístico en Semana Santa masifique el brote, en la terminal de autobuses de la capital argentina se repartían folletos y se entregaba repelente para los viajeros que se movilizaban a las zonas más afectadas del norte y noroeste del país.