La salvación de las fábricas de General Motors (GM) en Europa y de la compañía alemana Opel parece cada vez más difícil, pues la casa matriz en Estados Unidos ha dado en garantía todas las plantas a diversos bancos.
Según informaciones del semanario alemán "Focus" en su próxima edición del lunes, General Motors, que está amenazada de suspensión de pagos, ha empeñado todas las fábricas de su filial Opel como garantía para poder obtener los créditos que necesita para su supervivencia.
Opel ya no tiene patrimonio alguno, "sólo es un envoltorio", cita el semanario a un miembro del gobierno alemán, sin desvelar su nombre.