El Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas denunció ayer que en Corea del Norte se producen "graves y extendidas" violaciones, en alusión a casos de tortura, el trato detectado en algunos campos de trabajo o el inflingido a los ciudadanos norcoreanos repatriados.
La Unión Europea y Japón promovieron esta resolución, que contó con el apoyo de Corea del Sur pero no con el de seis de los 47 estados miembros del Consejo. Países como China, Rusia y Cuba dieron un 'no' y se registraron un total de 15 abstenciones a la citada iniciativa.
El texto también expresó su profunda preocupación por los secuestros de extranjeros en territorio norcoreano que actualmente siguen sin resolverse. Esta preocupación afecta de especial manera a Japón, ya que investiga el paradero de varios de sus ciudadanos raptados por agentes norcoreanos en las décadas de los setenta y ochenta.
