La empresa de cristalería Swarovski anunció hoy que despedirá a 600 de sus empleados austríacos antes de que termine el año y que otros 500 puestos de trabajo serán trasladados al extranjero en 2010.
El portavoz de la empresa, Markus Langes-Swarovski, justificó esta reducción de personal asegurando que la compañía "no había contado con descensos de este tipo" y explicó que es preciso "actuar a tiempo para no poner en peligro más puestos de trabajo".
La compañía, conocida en todo el mundo por sus figuras de cristal de roca, ha sufrido una fuerte disminución de pedidos que obligará, según Langes-Swarovski, a adaptar la producción y reducir en 2009 la mano de obra hasta 5.000 personas en la planta de producción de Wattens, en el Tirol austríaco.