El grupo sueco Autoliv, primer fabricante mundial de airbags y cinturones de seguridad, ha acelerado sus programas de ajuste para hacer frente al descenso de la producción automovilística mundial, lo que se ha traducido en la supresión de 3.000 puestos de trabajo en los dos primeros meses del año.
Autoliv explicó que de los 3.000 puestos de trabajo suprimidos durante los pasados meses de enero y febrero, 2.600 corresponden a empleados con contrato indefinido y los 400 restantes, a eventuales. Desde junio de 2008, la compañía ha suprimido 8.000 empleos, el 20% de su plantilla.
Por otro lado, la empresa explicó que en lo que resta de año debe hacer frente a vencimiento de deudas por importe de 279 millones de dólares (207 millones de euros al cambio actual), tras emplear en el primer bimestre del año 892 millones de dólares (661 millones de euros) procedentes de los recursos propios y de líneas de crédito a largo plazo.