La Policía italiana ha registrado las sedes y ha decomisado numerosa documentación a la compañía aérea italiana de bajo coste Myair, en el marco de una investigación en la que se acusa a la aerolínea de delitos tributarios y de bancarrota.
Ocho de sus dirigentes, entre los que figuran administradores, revisores de cuentas y consultores, han sido denunciados ayer por quiebra, recurso abusivo al crédito y omisión en el pago de algunos impuestos.
La compañía, por su parte, aseguró haber ofrecido a los investigadores "la máxima colaboración posible" y subrayó que "tener deudas, en este periodo, no es una vergüenza", según comunicó a través de una nota de prensa.
