Corea del Norte ha rechazado nuevos envíos de comida procedente de Washington, hasta 330.000 toneladas hasta finales de mayo, según denunció el portavoz del Departamento de Estado norteamericano, Robert Wood, quien confirma una nueva distensión entre Washington y Pyongyang.
Wood explicó que el programa rechazado "pretendía llevar comida a los norcoreanos necesitados". "Obviamente, estamos decepcionados", lamentó, criticando que esta negativa supone un paso atrás al acuerdo de colaboración alcanzado en mayo del año pasado, cuando ambas partes pactaron el envío de 500.000 toneladas de alimentos durante los siguientes doce meses.
El Gobierno estadounidense sólo ha tenido tiempo para remitir 169.000 toneladas de comida. El último envío, de 5.000 toneladas, llegó en enero por mar y está siendo distribuido por las ONG que operan en la zona.