Los secuestradores de los tres cooperantes extranjeros de la sección belga de Médicos Sin Fronteras (MSF) que fueron capturados ayer en la región sudanesa de Darfur han pedido un rescate a cambio de su liberación y han rechazado emplear la violencia durante el proceso, según afirmó ayer el gobernador de Darfur Norte, Osman Youssef Kebir.
La autoridad local añadió que las negociaciones con los secuestradores se desarrollan adecuadamente y se mostró esperanzado de que puedan derivar pronto en la liberación de las víctimas. Según el Centro Sudanés de Medios de Comunicación, Kebir ha hablado por teléfono con los captores y los rehenes. "Los secuestradores han pedido un rescate a cambio de su liberación y han asegurado que no están interesados en la violencia", declaró.
Los tres trabajadores fueron secuestrados junto a dos cooperantes sudaneses, cuando hombres armados irrumpieron en la sede de MSF-Bélgica en Serif Umra" (oeste de Darfur Norte) ayer y se llevaron a los cinco miembros del equipo. No obstante, horas después del ataque, los dos sudaneses fueron liberados por separado.