El Departamento del Tesoro de Estados Unidos decidió sancionar a once compañías iraníes relacionadas con el Banco Melli, de propiedad estatal, al considerar que colaboran en la proliferación de armas de destrucción masiva. Esta medida prohibirá a las compañías y empresarios norteamericanos hacer negocios con estas firmas y congelará los activos que éstas pudieran tener bajo jurisdicción estadounidense.
"La comunidad internacional ha reconocido los riesgos de proliferación que supone el Banco Melli de Irán", dijo el subsecretario del Tesoro para terrorismo e inteligencia financiera, Stuart Levey. "Seguiremos dando pasos para proteger la integridad del sistema financiero internacional descubriendo los bancos, compañías e individuos que apoyan al programa nuclear y de misiles iraní", añadió.
El organismo norteamericano ya había acusado al Banco Melli de estar involucrado en la proliferación de armas iraníes mediante la financiación de ciertas actividades y el mantenimiento de las cuentas de algunas empresas iraníes. Entre las empresas afectadas por la decisión destaca la filial de inversión del Melli.
