Estados Unidos lamentó la decisión de Ecuador de expulsar al diplomático estadounidense Mark Sullivan, acusado de intromisión en los asuntos locales por una disputa sobre un programa de ayuda, y afirmó que considerará las posibles respuestas.
La expulsión de Sullivan, que se produjo ayer, constituye la segunda expulsión de un diplomático estadounidense en el país en menos de 15 días.
Gordon Duguid, portavoz del Departamento de Estado, dijo que "la decisión del Gobierno de Ecuador de expulsar a un segundo diplomático estadounidense es muy conflictiva y levanta serias preocupaciones sobre el deseo de Ecuador de mantener una relación productiva".