Honda ha decidido extender hasta el próximo 23 de marzo como mínimo la suspensión de las operaciones de sus fábricas en Japón, teniendo en cuenta la actual situación del país y los esfuerzos para la recuperación.
Esta decisión de mantener paradas las líneas de produccción afecta a las fábricas de automóviles de Saitama y de Suzuka, así como a la planta de motocicletas de Kumamoto.
En relación con las actividades a partir del 24 de marzo, la empresa adoptará una nueva decisión teniendo en cuenta la situación del país. "Lamentamos los inconvenientes que podamos causar a nuestros clientes y les pedimos su comprensión en estos tiempos dífíciles", concluyó.