Madrid se convierte esta semana en la ciudad anfitriona de la primera reunión de la International Litigation Financial Network, una red internacional de despachos creada el pasado mes de mayo en Nueva York para compartir experiencias y conocimientos técnicos en litigios financieros transfronterizos. De ella forman parte un total de 20 despachos de 16 países, entre ellos, Cremades & Calvo Sotelo, firma que acogió ayer en su sede -que es, además, la Secretaría General de la Red- la primera ronda de conferencias, bajo la de Javier Cremades.
La International Litigation Financial Network o, en español, Red Internacional de Litigios Financieros, nace tomando como punto de partida los problemas que plantea la crisis financiera internacional. Así, la globalización financiera y el estallido de la crisis han provocado el desarrollo de numerosos procedimientos simultáneos en múltiples sistemas judiciales de todo el mundo en respuesta a los mismos problemas o productos financieros, y ello ha puesto de relieve la necesidad de una mayor coordinación entre los abogados que se ocupan de los litigios transfronterizos para garantizar una administración imparcial y eficaz de justicia.
Así, la Red Internacional de Litigios Financieros trata de proporcionar la experiencia, los recursos, la comunicación y los conocimientos técnicos necesarios para aplicar con eficacia y maximizar el uso de herramientas de colaboración ante la presencia de casos complejos sobre estas materias. También trata de evitar la duplicación y la adjudicación irregular de los mismos asuntos en distintas jurisdicciones, ayudando a sus miembros a trabajar mejor para sus clientes gracias al intercambio de conocimientos sobre otras jurisdicciones. La idea es, en definitiva, desarrollar mejores prácticas e intercambiar ideas entre los actores del ámbito jurídico de distintos países para que "la experiencia en litigios globales sea más transparente y comprensible, reduciendo riesgos y alentando las inversiones más seguras".
El fin último de esta colaboración no es otro que reestablecer la confianza de los inversores, en un contexto en que la mayor parte de los productos financieros cuentan con un elemento internacional, y donde las distintas legislaciones y sistemas judiciales plantean ciertas incertidumbres en caso de alcanzarse situaciones de crisis como la actual. De hecho, la primera orden del día de la Red sirvió para emitir una declaración llamando a la necesidad de mejorar la seguridad jurídica de los mercados financieros, de introducir mejores prácticas y de promover la colaboración de los reguladores.
España como paradigma de la mala praxis bancaria
Precisamente el caso de España se ha convertido, también para la Red, en paradigma de las malas praxis bancarias. De ahí que uno de los objetivos de esta primera cita sea adoptar una serie de recomendaciones para la abogacía del país. La regulación comunitaria también se encuentra en el punto de mira, y los miembros de la Red abren el debate sobre una posible armonización en aspectos como la interposición de acciones colectivas -muy útiles para el pequeño inversor y los consumidores-, una materia en la que cada Estado miembro de la UE cuenta con previsiones diferentes.
Tal y como aseguró Javier Cremades durante la presentación de las jornadas, el punto de partida es "recuperar la confianza" en un contexto en que España "probablemente concentra las peores prácticas financieras de los últimos años". Cremades puso como ejemplo el caso de Bankia, las participaciones preferentes y el caso de Pescanova, y echó en falta que las instituciones supervisoras, Banco de España y Comisión Nacional del Mercado de Valores, no hayan pedido disculpas ni asumido su responsabilidad. Aseguró, a este respecto, que ello provoca una "mala imagen" de cara a los inversores. No basta, comentó, con "pedir disculpas", sino que resulta necesario buscar un "alivio para los afectados".
Además, para Cremades, resulta necesario ser "competitivos" tras "tanto daño" a los inversores. En este sentido, recordó que los tribunales están dando respuestas satisfactorias en casos como el de las participaciones preferentes: si al principio parecía que los clientes no tenían anda que hacer, se han ido produciendo decisiones a favor de los inversores, por lo que los jueces "están haciendo su parte del trabajo".
Los miembros fundadores de la Red incluyen despachos de abogados de Estados Unidos, Reino Unido, España, Austria, Suecia, Colombia, Israel, Irlanda, Finlandia, Luxemburgo, Marruecos, Pakistán, Turquía, India, Italia y Brasil. La Red está en negociaciones de adhesión con otras empresas líderes en litigios financieros en otras jurisdicciones.