Ante la reciente dimisión del que fuera presidente del Consejo General del Notariado, Antonio Ojeda, el Colegio Notarial de Madrid ha anunciado que, aunque comprende su dimisión "a la vista de la sentencia anulatoria recientemente recaída sobre las 'compensaciones institucionales' que se autootorgaron ciertos miembros del Consejo", resulta criticable el breve plazo de la convocatoria para el nuevo presidente.
En una nota de prensa emitida por el Colegio madrileño, la institución habla del "entorpecimiento del movimiento de democratización del notariado" -iniciado en las Jornadas de Madrid del 5 de febrero- que supone este sistema de elección y que blinda, "en contra de los dictados de la buena fe", el nombramiento del nuevo cargo.
En este sentido, "parece especialmente rechazable desde el punto de vista moral que la convocatoria se realice por el Vicepresidente del Consejo General, abortando, con el breve plazo concedido, un proceso electoral normal y democrático en su propio y exclusivo beneficio, en el caso de que, como es previsible, presente su candidatura al cargo, particularmente cuando en él concurren las mismas causas que han motivado la dimisión del presidente, esto es, la anulación de las llamadas 'compensaciones institucionales' y el fracaso evidente de la política corporativa", recoge la nota.
