¿Han oído hablar del nuevo Google Bank? ¿Y del próximo lanzamiento de Apple convertido en un iBank? Nadie sabe lo que pasará en el largo plazo, pero en el corto es poco probable que no los veamos en funcionamiento como bancos. Ambas compañías insisten constantemente que no tienen interés en convertirse en entidades financieras, a pesar de que Google cuenta con una licencia bancaria en Holanda desde hace varios años.
Algo lógico si analizamos cómo le va al sector financiero en general. Además, ¿por qué conformarse con la baja rentabilidad de este sector cuando ellos generan mucha más con sus propios negocios? Por ponerlo en contexto, el sector financiero español hoy cuenta con una rentabilidad media del 6% aproximadamente, si bien es verdad que en los buenos años llegó hasta el 15% y el 20%, ratios que difícilmente veremos de nuevo en la banca.
En cambio, si nos fijamos en los resultados del último trimestre de 2014 de Apple, en concreto en su rentabilidad medida en beneficio neto respecto a ventas, estaríamos hablando de casi un 25%. En el caso de Google la rentabilidad sería algo superior, el 26%. Desde este punto de vista parece que para estas dos compañías el desembarco en el sector financiero puede no resultar especialmente atractivo, por lo que los bancos podrían estar tranquilos...
Pero no seamos ingenuos. Dentro del sector financiero existen servicios que son rentables, de hecho muy rentables, tanto en términos económicos como en términos de información. Me estoy refiriendo a los medios de pago, un segmento de negocio que en los últimos años se ha caracterizado por la falta de estandarización y por la gran dispersión de soluciones. Para la banca esta línea de negocio puede significar entre un 8% y un 10% de sus ingresos. Pero más allá del aspecto económico, es clave para el sector puesto que además de generar mayor vinculación con los clientes, proporcionan un gran conocimiento sobre los mismos, un valor a veces incalculable. No olvidemos que la información es poder.
Casualmente, la semana pasada se han producido dos noticias sobre medios de pago que no han sido protagonizadas por ninguna entidad financiera, sino por las dos grandes tecnológicas por excelencia, Apple y Google. ¿Coincidencia?, es posible.
¿El año de Apple Pay?
Por un lado, el CEO de Apple compartía algunos detalles sobre el gran éxito de su plataforma Apple Pay, lanzada a finales del año pasado junto con su flamante iPhone 6. En los últimos cuatro meses Apple Pay ha tramitado 2 de cada 3 dólares pagados en EEUU mediante sistemas contactless.
Además, cuentan con lo más importante, el apoyo de los comercios y de los bancos. Estos últimos no tienen más alternativa que unirse al más fuerte. Desde su lanzamiento, 250 entidades financieras se han unido a la firma de la manzana con lo que ya suman un total de unos 750 bancos comprometidos con ofrecer este servicio. Por parte de los comerciantes, un pilar básico en la cadena de pagos, ha obtenido un gran éxito en cadenas como Whole Foods, con un incremento del 400% en el uso de pagos móviles desde el lanzamiento de Apple Pay, o Panera Bread, donde cuentan ya con el 80% de este tipo de transacciones según diferentes fuentes.
Y Apple no para, Cook también recordó su masiva entrada en más de 200.000 puntos de autoservicio tras su acuerdo con USA Technologies. Desde ahora también se podrá pagar en kioscos, servicios de transporte, máquinas expendedoras, negocios de lavado de coches y lavanderías entre otros. "Pienso que este va a ser el año de Apple Pay", palabras del CEO de Apple que no hacen sino incrementar la presión sobre los competidores.
Google mueve ficha
Por otro lado, Google también mueve ficha. En 2013 anunció que añadía a su potente correo electrónico Gmail la posibilidad de realizar pagos simplemente adjuntando dinero como si se adjuntara cualquier otro archivo. Su objetivo era facilitar a los usuarios que pudieran realizar transferencias de la forma más sencilla y rápida posible por Internet, apoyados en su Google Wallet. La noticia radica en que desde ahora no sólo podrá utilizarse este servicio en EEUU, sino también en el Reino Unido, de lo que se puede inferir que el próximo paso será verlo en el resto de Europa.
Las compañías nativas digitales han puesto el foco en los pagos y el tiempo dirá si esto será la puerta de entrada en la muralla de acceso al resto de servicios bancarios.
Rodrigo García de la Cruz, director del PDD Innovación y Tecnología Financiera del IEB.