
Hace poco más de un año unas declaraciones del secretario de Estado de Comercio Jaime García-Legaz durante el Ágora ElEconomista incendiaban las redes sociales españolas y chinas ante la perspectiva de que España introdujera la residencia por inversión más generosa de toda Europa. En nuestro país algunos denunciaron la "mercantilización" de un derecho fundamental y otros criticaron que se "malvendiera" este privilegio. En China, la sorpresa se confundía con la desconfianza ante la iniciativa, pero los miles de comentarios vertidos delataban el interés por esta medida en el Lejano Oriente.
Los célebres 160.000 euros de García-Legaz nunca se aplicaron y el Gobierno optó finalmente por el mismo umbral mínimo que en Portugal. La normativa introducida por la Ley 14/2013 es casi un calco de la portuguesa, pero obvia algunos aspectos positivos de la misma que se desarrollaron con posterioridad. Un ejemplo es el uso de cuentas fiduciarias para la compraventa de inmuebles con residencia, una medida que evita el círculo vicioso de no comprar sin el permiso de residencia, pero tampoco poder solicitarlo sin haber invertido primero. Ésta fue también una de las propuestas planteadas por el autor durante la preparación de la Ley.
Precisamente el ejemplo portugués nos proporciona una referencia de la magnitud de un fenómeno que un año atrás muchos exageraron. Nuestros vecinos lusos llevan ya un año con su residencia por inversión y en este periodo han otorgado 318 permisos a otros tantos inversores, un 78% de los cuales fueron chinos. Sin duda, el número no resulta nada espectacular y equivale a una inversión total de unos 160 millones, una cifra irrisoria si se compara con los miles de millones que mueve el inmobiliario español incluso en crisis.
El mercado inmobiliario en España
En España deberían ser mejores los datos dentro de un año. A diferencia de Portugal, España es un mercado inmobiliario más reconocido y diverso, donde por ejemplo destaca el factor ruso, ausente en el país vecino. Entre 2006 y 2012 la compra de inmuebles por parte de ciudadanos rusos se ha multiplicado por diez y son ya unos 65.000 los rusos residentes en España, mientras fuentes soviéticas calculan en 75.000 sus ciudadanos con intención de adquirir inmuebles en nuestro país.
En el caso de los chinos, la residencia Schengen como derecho personal para ellos y sus familias constituye el atractivo clave para la inversión, pues no tendrán intención de pasar largas temporadas en España, a diferencia de los rusos. En este contexto, la Ley 14/2013 sigue plateando algunas dudas importantes en aspectos como la acreditación de los medios económicos, los derechos de los residentes-inversores y sus familiares en España o el tránsito de la residencia temporal a la permanente. En este último punto, la Embajada China en España publicaba un aviso en su web alertando a sus ciudadanos de la falsedad de las informaciones difundidas sobre la obtención automática de la residencia permanente a los cinco años de la temporal.
La inversión china en España se verá sin duda muy favorecida por este nuevo régimen de residencia. En 2012 sus ciudadanos invirtieron más de 400 millones de euros en inmuebles extranjeros, con presencia testimonial en España. El autor ha comprobado en inversiones industriales cómo la posibilidad de obtener la residencia Schengen añade ahora un atractivo adicional a operaciones que quizás no son tecnológica o financieramente tan interesantes para los empresarios chinos como en otros países. Tal como ocurrió en EEUU con el régimen EB-5, la residencia por inversión se puede aplicar no sólo a la compra de pisos, sino también para financiar industrias, hoteles, bodegas y otros proyectos.
Otra tendencia que podría producirse en el futuro son las promociones inmobiliarias a medida para el público asiático. La concentración de compradores es recomendable para facilitar la gestión de los inmuebles de un colectivo que no suele hablar inglés y menos español. Asimismo, los que buscan sólo gastar 500.000 euros para obtener la residencia, ni un euro más ni menos, demandarán obra nueva de este valor exacto, cuando la mayoría de nuestro parque pasa de un par de cientos de miles de euros al producto de súper-lujo muy por encima del medio millón.
Solucionar las dudas que sigue planteando la aplicación de la Ley es una de las condiciones necesarias para desplegar sus efectos beneficiosos. Junto a ello, también conviene mejorar los procesos administrativos, poco ágiles y largos. Debemos recordar que los trámites se inician ante nuestras embajadas y consulados y que en 2014 Asuntos Exteriores volverá a ser el más castigado en los Presupuestos del Estado. No podemos permitir que los recortes, como el populismo de hace un año, nos priven de oportunidades de inversión.
Jacinto Soler-Matutes, profesor de Estudios Chinos en la Universidad Pompeu Fabra y fundador de www.spainresident.com.