
Si afirmamos que los famosos están enganchados a las redes sociales no estaremos descubriendo nada nuevo. Sólo hay que ver lo que le ocurre a Ricky Martin cuando no le retuitean. No obstante, lo que le ha pasado a Adriana Abenia ya es como para mirárselo. La guapa y dicharachera presentadora, que se quedó sin batería en su Iphone mientras hacía la compra, no puede vivir sin su móvil, y no se lo ocurrió otra cosa mejor que ponerlo a cargar entre bote y bote de mahonesa.
El móvil, el mejor amigo del famoso
Y es que la relación de los famosos con estos dispositivos es más que intensa. Los tienen de todas las formas, colores y tamaños, y jamás se les ocurriría salir de casa sin ellos. Y si no que le pregunten a Irina Shayk. La novia de Cristiano Ronaldo puede pasarse una tarde entera dando vueltas por la ciudad, con la única compañía de su mejor amigo, el smartphone.
Otros, como Marc Bartra y Melissa Jiménez, lo utilizan a modo de ventana, desde la que cada día, nos permiten asomarnos a su historia de amor. Por último, también los hay como Fernando Alonso, que los emplean para testimoniar todas y cada de sus victorias, que últimamente no son muchas.
Adicta al móvil y al trabajo
Y claro, tanta actividad, tiene consecuencias. Los teléfonos de nuestras celebs echan humo, y se quedan rápido sin batería. Por ello, para la próxima, esperemos que Adriana esté más pendiente de llevarlo al máximo de carga. Al igual que debe estarlo ella. La presentadora lleva una temporada que no para. Después de su paso por ¡Mira quién baila!, la maña tuvo el privilegio de presentar, junto a Jaime Cantizano, la gala de los Premios Iris, que premian cada año lo mejor de la televisión española, tanto a nivel estatal como autonómico. Una muy buena noticia para ella, que no lo fue tanto para su novio, que tuvo que ver cómo tenían que posponer la celebración de su boda, que estaba fijada para unos días después.
Entre tanto ajetreo, esperemos que Adriana encuentre unos días libres para poder recargar las pilas este verano. Sólo le recomendamos que elija un sitio un poco más paradisiaco que el supermercado.
Fotos: Twitter e Instagram