
Cristiano Ronaldo llegó a Arabia Saudí en 2023 como el gran fichaje estrella de la liga profesional de fútbol y, desde entonces, se ha convertido en algo más que un jugador: es el rostro internacional de un país que quiere abrirse al mundo. Su carisma y su capacidad de influencia trascienden lo deportivo, y ahora protagoniza la nueva campaña global de la Autoridad de Turismo Saudí. Bajo la marca Saudi Welcome to Arabia, el astro portugués recorre escenarios icónicos que van mucho más allá del césped: desde el desierto hasta los modernos estadios, desde carreras de caballos hasta eventos de moda o de eSports.
"Formar parte del viaje de Arabia Saudí como centro deportivo mundial ha sido realmente especial y, de alguna manera, inesperado para mí hace unos años", reconoce CR7. Sus palabras reflejan el espíritu de un país que honra sus raíces pero que se proyecta hacia un futuro cosmopolita, donde lo local y lo global conviven en equilibrio.
Un calendario de grandes citas deportivas y culturales
La campaña sitúa a Arabia Saudí en el epicentro de los grandes eventos internacionales. El país será sede de la Copa Mundial de la FIFA 2034, la Copa Asiática de la AFC en 2027, los Juegos Olímpicos de eSports en 2027 y los Juegos Asiáticos de Invierno en 2029. A ellos se suman citas que ya forman parte del calendario habitual como la Fórmula 1, el LIV Golf Riad, torneos de tenis y la propia Liga Profesional Saudí.

Pero no todo gira en torno al deporte. La cultura y el entretenimiento ocupan un lugar central: la Semana de la Moda de Riad atrae a diseñadores internacionales, el Festival Internacional de Cine del Mar Rojo se consolida como escaparate del séptimo arte, y las bienales de arte, la música y la comedia completan un cartel vibrante en ciudades como Riad, Yeda o AlUla. Arabia Saudí se posiciona así como un destino integral, donde cada viajero encuentra su propio motivo para quedarse.
Visión 2030: lujo, modernidad y tradición
Detrás de este despliegue hay una estrategia clara: la Visión 2030, el plan con el que Arabia Saudí busca diversificar su economía y consolidarse como destino turístico de primer nivel. La cifra habla por sí sola: más de 800.000 millones de dólares en inversión, con la meta de alcanzar 150 millones de visitantes en 2030.
La modernización de infraestructuras, la construcción de estadios de vanguardia, resorts de lujo y centros culturales van de la mano de un compromiso con la hospitalidad árabe y sus tradiciones milenarias. Como explica Su Excelencia Ahmed Al Khateeb, ministro de Turismo: "Arabia Saudí está consolidando su posición como destino mundial que combina autenticidad cultural, cálida hospitalidad y la emoción de eventos de talla mundial".
Un destino aspiracional de sol, desierto y vanguardia
El encanto de Arabia Saudí reside en su capacidad de conjugar contrastes. En pocos días se puede recorrer el Mar Rojo con playas vírgenes, descubrir oasis escondidos en medio del desierto, asistir a un desfile de moda en la capital o disfrutar de un concierto internacional bajo las estrellas en AlUla. Es un país donde los camellos conviven con los superdeportivos, y donde la espiritualidad de la tradición beduina se encuentra con la modernidad tecnológica de los eSports.
Cristiano Ronaldo lo resume con su particular visión: "Desde camellos hasta caballos, desde carreras hasta deportes electrónicos, desde el desierto hasta el estadio, este es un lugar donde todos los jóvenes atletas pueden soñar a lo grande". Y es que la campaña no solo muestra un destino turístico, sino un estilo de vida: vibrante, aspiracional y lleno de posibilidades.

Arabia Saudí, más allá de las expectativas
El turismo saudí crece a un ritmo sin precedentes, alimentado por una mezcla única de exotismo y modernidad. Resorts de lujo, experiencias culturales de primer nivel, eventos globales y una identidad que combina hospitalidad árabe con ambición internacional convierten al país en uno de los destinos más comentados del momento.
"Desde eventos de talla mundial hasta lugares emblemáticos y paisajes impresionantes, Arabia Saudí es una tierra por descubrir", apunta Fahd Hamidaddin, CEO de la Autoridad de Turismo Saudí. "Queremos que el mundo venga, disfrute de nuestro sol invernal y sea testigo del futuro en tiempo real". Y mientras tanto, Cristiano Ronaldo, con su magnetismo global, sigue siendo el mejor escaparate para invitar al viajero a mirar más allá del balón y dejarse seducir por un país que sorprende a cada paso.