
Para Paco Roca, Premios Nacional de Común en 2008, España tiene un problema con la "desmemoria" y ello conlleva que "ser fascista o franquista es lo más rebelde o moderno entre los jóvenes", algo que apunta que es el "gran peligro" por no conocer el pasado. Así lo expresa el artista en la presentación de la exposición La memoria. Viaje emocional por los cómics, que alberga el Instituto Cervantes hasta el 28 de septiembre.
"Tenemos partidos políticos demócratas que no se han posicionado claramente en contra de lo que fue una dictadura. Y ese es el peligro de desconocer el pasado. Ahora hablamos del olvido y de todo esto como un pasado, pero que puede convertirse en un futuro si empezamos a pensar que la democracia no cumple los deseos de todo el mundo", afirma.
El artista asegura que la desmemoria del pasado "embarra" la historia, lo que entraña que "se pueda blanquear en una democracia lo que supone una dictadura". "Vivimos en un país que a la fuerza nos ha hecho desmemoriados y eso tiene graves riesgos", advierte Roca.
Una exposición de memoria visual
La memoria. Viaje emocional por los cómics es una obra pensada para otorgar a España memoria visual sobre su pasado reciente, "un elemento ausente en el país y que explica "muchos problemas del presente", según el artista. "Nos encontramos con todos esos bulos o negaciones sobre determinadas cosas. En la II Guerra Mundial, los aliados lo primero que hicieron fue documentar los campos de exterminio para que el olvido y los bulos del futuro nunca pudiesen llevarse el horror de lo que había ocurrido. En España no tenemos eso, no tenemos una memoria visual y es parte también de los trabajos que hace el cómic".
En total, la muestra recoge más de 70 obras de Roca, además de cuatro murales con dibujos inéditos, y cuenta con 19 viñetas enmarcadas y 51 piezas originales en vitrina, entre páginas, bocetos, apuntes, guiones y fotografías de referencias. El hilo conductor de la muestra es la memoria, tanto en su vertiente histórica como en la emocional y la identitaria.
El recorrido está estructurado en tres partes, cada una representada a través de un mapa emocional y la correspondiente obra del autor. Por un lado, la memoria histórica, centrada en cómics como Los surcos del azar y El abismo del olvido. Por el otro, la memoria e identidad, cuando a partir de 'Arrugas' se aborda la memoria como un elemento clave en la construcción de la identidad, reflejando el impacto del paso del tiempo y la pérdida de recuerdos.
Por último, la memoria familiar, enfocada en Regreso al Edén y La casa, en la que se profundiza en los recuerdos íntimos y la herencia emocional.
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