
El otoño es una época perfecta para disfrutar de un agradable día en un balneario. En España muchos son los que tienen fama a nivel internacional, pero en Extremadura hay uno que destaca por su ubicación y por ser el más antiguo de la península.
Alange es un municipio situado en la provincia de Badajoz, en la comunidad autónoma de Extremadura, España. Este pequeño y pintoresco pueblo es conocido por su balneario histórico, que data de la época romana, y su cercanía al embalse que lleva el mismo nombre. Alange ofrece una combinación de patrimonio histórico, paisajes naturales y un momento de bienestar gracias a sus aguas termales.
Ubicado a los pies de una sierra y a orillas del río Matachel, Alange posee un entorno natural privilegiado. Su famoso Balneario, con aguas mineromedicinales, es uno de los principales atractivos de la localidad. Los romanos ya aprovechaban las propiedades curativas de estas aguas, y el balneario conserva algunas de las estructuras originales, como sus termas, que fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1993 como parte del conjunto de monumentos de Mérida.
La historia de Alange está profundamente ligada a sus termas romanas, pero también ha vivido influencias árabes, de las que deriva su nombre, que significa "el agua" en árabe. Su fortaleza medieval, conocida como el Castillo de Alange, situada en lo alto de un cerro, fue construida durante la dominación musulmana y ofrece vistas espectaculares del embalse y los alrededores. Aunque en ruinas, es un testimonio importante de la historia medieval de la región.
Además de disfrutar de las termas y visitar el castillo, los viajeros deciden echar un vistazo a la Iglesia de Nuestra Señora de los Milagros, un bello ejemplo de arquitectura religiosa del siglo XIII, con influencias mudéjares. En los alrededores, se encuentra el Embalse de Alange, para disfrutar de un día caluroso. Sin embargo, en esta época del año es mejor disfrutar de las vistas y dar un paseo en plena naturaleza.