Madrid, 9 oct (EFE).- Los madrileños prefieren la uva sin pepitas, blanca, crujiente y con el sabor de la moscatel, según un trabajo de investigación regional que, cuando esté concluido, facilitará a los agricultores la uva de mesa preferida por los consumidores.
El consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Borja Sarasola, ha presentado hoy este trabajo durante la sexta edición de la Cata Profesional de Uvas de Mesa y Vinos que ha organizado el Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario (IMIDRA).
La cata, celebrada en el restaurante "Viridiana" del chef Abraham García, tenía como objetivo identificar los diferentes sabores que ofrecer las uvas de mesa, determinar su diversidad de formas, colores y tamaño, además de vincular las uvas con recetas culinarias y su maridaje con vinos.
El trabajo de investigación detalla que la uva de mesa preferida por los consumidores es blanca, sin pepitas, crujiente y con el sabor de la moscatel.
Desde 2008, la Comunidad de Madrid trabaja en un proyecto para conseguir una uva sin pepitas y que respondiera a la "uva perfecta": blanca, gruesa y crujiente, según las preferencias de los consumidores.
Para conseguir esta uva, el IMIDRA dispone de más de 2.300 plantas germinadas que precisarán unos cinco años para crecer, y que se han obtenido al cruzar una variedad de uva blanca, con sabor moscatel y semillas, y otra sin semillas, rosa y sin sabor.
La Comunidad estima que una plantación de entre 600 y 700 hectáreas de esta nueva uva de mesa podría cubrir el cinco por ciento de la uva de mesa comercializada al año en Mercamadrid entre junio y diciembre, además de una nueva oportunidad de empleo en la región.
