
Casi 30 años después de los hechos, este martes se abrió en París el juicio contra el médico alemán Dieter Krombach, de 75 años, acusado del asesinato de la hija de su mujer, Kalinka, en presencia del acusado y del padre de la víctima, André Bamberski, de 73 años.
Dieter Krombach, juzgado en ausencia por la justicia francesa en 1995 que lo condenó a 15 años de cárcel, llegó a la sala de tribunal especial apoyándose en un bastón y caminando con dificultades.
Krombach no miró ni un instante a André Bamberski, que lo persigue desde 1982 y que no dudó en hacerlo secuestrar en Alemania para que el "padrastro" de su hija fuera juzgado en Francia. Kalinka tenía 14 años el 10 de julio de 1982, cuando fue hallada muerta en la cama, en la casa en que vivía con su madre y con el marido de ésta en Lindau, cerca del lago Constanza, al sur de Alemania.
Estaba en perfecto estado de salud y la autopsia concluyó una muerte inexplicada. Varios exámenes forenses del cuerpo de la víctima sacaron a la luz una serie de elementos que pusieron en duda las explicaciones de Krombach sobre las horas previas a la muerte de la adolescente.
En un primer momento, Dieter Krombach afirmó que le había inyectado una solución a base de hierro para que pudiera broncearse más rápido. Luego dijo que la muchacha tenía anemia.
La justicia alemana consideró que las pruebas no eran suficientes y archivó el caso en 1987, pero Francia lo condenó en 1995 en ausencia y lo condenó a 15 años de cárcel -pena máxima en este caso- por "violencia voluntaria causante de muerte sin intención de ocasionarla".
Francia pidió su extradición en función de una orden europea de detención emitida en 2004. Alemania afirmó que ya había juzgado el caso.
Por esa razón, André Bamberski decidió hacer secuestrar al médico el 17 de octubre de 2009 en su casa de Scheidegg. Dieter Krombach apareció esposado cerca del tribunal de Mulhouse, este de Francia.
Ese episodio de película permitió a la justicia francesa encarcelar a Krombach y organizar un nuevo juicio que se prolongará hasta el 8 de abril para tratar de aclarar las misteriosas circunstancias en que murió Kalinka. "Para Krombach la perspectiva de ser juzgado es insoportable, pero esta vez, no escapará", sostuvo Laurente de Caunes, abogado de Bamberski.
Uno de los abogados defensores de Krombach, Philippe Ohayon, anticipó que pedirá la nulidad invocando además las circunstancias en que el médico fue traído a territorio francés. Según Bamberski varias alemanas afirmaron haber sido víctimas de abusos sexuales del médico, condenado en 1997 en su país por violar a una paciente.
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