La Policía turca ha detenido a decenas de personas en una redada por las supuestas escuchas ilegales realizadas a seguidores del clérigo musulmán Fethulá Gülen, uno de los principales detractores del presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, han informado fuentes de los servicios de seguridad.
Las fuentes consultadas han indicado que se han dictado órdenes de detención contra 54 personas, de las cuales 37 ya han sido arrestadas en varias redadas simultáneas en Ankara y en otras 20 provincias.
Mandos de la policía
Decenas de mandos de la Policía han sido detenidos en el marco de estas investigaciones desde mediados de 2014. El pasado 8 de febrero, se realizaron varias redadas en doce ciudades y, como consecuencia de la operación, 17 mandos de la Policía permanecían detenidos una semana después.
El presidente Erdogan acusa a Gülen de haber creado un "estado paralelo" en el seno de la administración turca y de estar intentando derrocarle por medio de sus seguidores infiltrados en la Policía y el sistema judicial. El mandatario sostiene que los seguidores de Gülen fueron los que impulsaron una investigación por corrupción que afectó a varios altos cargos gubernamentales a finales de 2013.
Durante ese escándalo, se filtraron a la prensa varias grabaciones de altos cargos, incluido el propio Erdogan. Desde entonces, miles de mandos de la Policía, jueces y fiscales han sido destituidos o trasladados.
En diciembre de 2014, un tribunal turco aprobó una orden de detención contra Gülen bajo la acusación de liderar una organización delictiva y en febrero se ha anulado su pasaporte turco.
Este martes, las autoridades judiciales turcas han emitido una orden de dentención contra Gülen y un columnista de un periódico relacionado con el caso de las escuchas ilegales, según la prensa turca. Gülen, que vive exiliado por decisión propia en Estados Unidos, ha negado que esté implicado en una trama para derrocar al Gobierno.
Detenciones por espionaje