
Una bomba de fabricación artesanal ha estallado este martes en el centro de Atenas frente a una oficina del banco estadounidense JP Morgan, provocando daños materiales, según ha informado una fuente policial, que ha asegurado que la explosión no ha originado heridos.
Una media hora antes de la atentado, un desconocido ha llamado a un diario griego informando de la inminente explosión. En ese período de tiempo, la policía ha desalojado el barrio de Kolonaki, en pleno barrio de la capital. Finalmente, la explosión ha ocurrido a las 19.50, hora local, (17.50 hora GMT).
El atentado ha provocado daños materiales a la entrada de las oficinas del banco, situadas en el segundo piso de un edificio de la calle Haritos. "La explosión dañó la puerta exterior y reventó algunas ventanas", ha explicado un portavoz policial. De momento, el ataque no ha sido reivindicado.
Otros ataques
Grupos radicales de izquierda han perpetrado diversos atentados en los últimos meses contra sucursales bancarias, comisarías y lugares emblemáticos, siguiendo los pasos del grupo terrorista 17 de noviembre y Lucha Revolucionaria Popular (ELA), ambos desmantelados a principios de los años 2000.
Uno de los últimos ataques tuvo como objetivo al Parlamento griego el pasado enero, cuando la organización Conspiración de Núcleos de Fuego reivindicó un atentado con bomba que causó daños materiales.
Grecia atraviesa una difícil situación económica debido al
abultado déficit de las cuentas públicas y el severo plan de ajuste anunciado por el Gobierno para enderezar el país, en el que se ha generado un gran malestar social.