Con poco más de 17.900.000 habitantes, un ingreso per cápita de 19.000 dólares, una estabilidad política y económica evidentes, y, sobre todo, un Estado de derecho y seguridad jurídica que es garantía de los inversionistas nacionales y extranjeros, Chile es un lugar ideal para invertir.
A ello se suma una red de 26 acuerdos comerciales con 64 mercados, que representan el 64,1% de la población mundial y el 86,3% del PIB global. De ellos, 15 acuerdos son de libre comercio, e incluyen a la Unión Europea (UE), China, y Estados Unidos. Chile, que es miembro entre otros de la OCDE y la Alianza del Pacífico, albergará en 2019 la Cumbre de la APEC, en la que recibirá a las principales economías de Oriente, además de EEUU, Australia, Rusia, Perú, México, Canadá y Nueva Zelandia.
En 2002 Chile firmó un acuerdo de asociación con la UE, que incluyó un acuerdos de libre comercio y de cooperación. Ahora se está negociando su modernización, que se espera que pueda finalizar este año.
Por invitación de Argentina, Chile participa este año en las reuniones técnicas del G-20, y el presidente, Sebastián Piñera, lo hará en la Cumbre de Jefes de Estado y Gobierno que tendrá lugar en Buenos Aires en noviembre.
Por otra parte, el desarrollo de un país depende en buena parte de la inversión extranjera y, en ese sentido, el Ministerio de Economía ha establecido la Oficina de Gestión de Proyectos Sustentables (GPS), que buscará agilizar y reducir los trámites tanto para el sector público como para el privado.
El ministro Valente aseguró: "Hemos hecho un catastro de 65.000 millones de dólares en proyectos que podrían desarrollarse durante los próximos cuatro años y, si esos proyectos efectivamente ven la luz, la generación de empleos permanente va a ser entorno a los 250.000 empleos de calidad".
Además, se mandató a la Comisión Nacional de Productividad un estudio para continuar en la desburocratización, con énfasis en la digitalización.