
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha asegurado en el Congreso que en estos momentos la intervención pública es "necesaria e insustituible" para asegurar la estabilidad, y que será cada vez más necesaria para impulsar, a nivel nacional y europeo, la actividad económica.
El jefe del Ejecutivo adelantó también que las primeras operaciones de compra de activos a través del fondo con cargo al Tesoro se podrán realizar ya durante el próximo mes de noviembre, para lo que se aprobará este ejercicio un crédito extraordinario de 10.000 millones ampliables hasta 30.000 millones.
Así defendió Zapatero en el Congreso de los Diputados la convalidación de los dos decretos ley sobre medidas financieras para hacer frente a la crisis en la que se encuentra inmerso el país, donde advirtió que el Gobierno no llevará la intervención estatal a mercados que estén en condiciones de atender satisfactoriamente los intereses generales.
"No queremos una banca pública"
Zapatero aseguró que el Gobierno no llevará la intervención estatal a mercados que estén en condiciones de atender satisfactoriamente los intereses generales. "No queremos crear una banca pública ni sustituir al mercado", señaló Zapatero, quien recordó que el Gobierno ha actuado de acuerdo con la urgencia que requería la gravedad de la situación y adaptando los nuevos remedios extraordinarios a las circunstancias específicas de la economía española.
Al explicar el contenido de los decretos, el jefe del Ejecutivo señaló que la habilitación de los créditos necesarios para completar la dotación máxima del Fondo con cargo al Tesoro se incluirá en la tramitación parlamentaria del proyecto de ley de los Presupuestos Generales (PGE) para el próximo año.
Este fondo invertirá en activos de máxima calidad y se regirá por los criterios de objetividad, rentabilidad, eficiencia y diversificación, por lo que recurrirá a procedimientos competitivos para la selección de activos, en particular mediante subastas. Las adquisiciones se harán mediante compra en firme o con carácter temporal, según explicó el jefe del Ejecutivo.
Recuperar la inversión
Según el jefe del Gobierno, el hecho de que sean activos de calidad y que lo haga a precios competitivos, permite pensar que el Estado tiene "fundadas expectativas" de recuperar e incluso rentabilizar la inversión realizada.
En cuanto al segundo decreto, que consiste en otorgar avales del Estado a las operaciones de financiación nuevas que realicen las entidades de crédito residentes en España, Zapatero explicó que se incluyen las emisiones de pagarés, bonos y obligaciones admitidas a negociación en mercados secundarios oficiales españoles. Además, el aval se podrá extender, en su caso, a otros instrumentos bancarios, como los depósitos interbancarios, en el marco de un esquema concertado entre los gobiernos de la zona euro.
El apoyo de Rajoy
El líder del PP ha solicitado al Gobierno más concreción en las herramientas de control sobre los planes de ayuda para los bancos. "El consejo rector encargado de comprar activos a los bancos es una mesa camilla que se puede reunir en casa de Solbes" porque está formada por subordinados de este, ha señalado Rajoy.
Rajoy cree que el Banco de España tiene que tener más peso sobre el control de los planes y que tiene que aumentar el seguimiento del Congreso a los mismos.
El líder popular ha transmitido a Zapatero que puede contar con su voto afirmativo a los planes si reciben el compromiso de que se incluirán en la letra pequeña de las medidas estas peticiones para mejorar su control.