
El subdirector de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada, José Ignacio Conde-Ruiz, ha explicado que los cálculos usados por el Gobierno en los Presupuestos Generales del Estado son excesivamente optimistas por el lado de los ingresos. El Gobierno dejará de lado los ajustes en 2015: prevé ingresar 9.000 millones más.
"Según los presupuestos de la Seguridad Social los ingresos por cotizaciones van a pasar de 102.838,92 millones a 109.833,30 millones, es decir, un aumento de 6.993,38 millones (el 6,8%). Una subida muy sorprendente si tenemos en cuenta que los últimos datos de ejecución presupuestaria de la Seguridad Social hasta agosto solo crecen un 1%", argumenta Conde-Ruiz en el blog Nada es Gratis.
¿Récord de ingresos en la SS?
Unos datos que parecen no estar ceñidos a la realidad. Y es que, de confirmarse ese incremento de ingresos en la Seguridad Social se batiría el récord en recaudación por cotizaciones de 2008. Y eso teniendo casi el doble de desempleo y menos cotizantes.
El subdirector de Fedea comenta que "si miramos el cuadro macroeconómico del Gobierno vemos como el ejecutivo contempla una subida del empleo del 1,4% y un aumento en la remuneración por asalariado del 1%. Unos simples cálculos con supuestos optimistas nos hacen ver fácilmente que el dato de ingresos está muy inflado".
Creación de empleo
Conde-Ruiz acude a las previsiones del Gobierno, que aseguran una creación de 230.000 empleo a tiempo completo "que si somos generosos serían no más de 300.000 nuevos cotizantes... la base media de cotización de los nuevos empleos sería de 1.802 euros al mes, teniendo en cuenta Contingencias, desempleo, Fogasa y Formación Profesional, que es el 38% de la base de cotización, es fácil ver que aumento de ingresos por esta vía como máximo es de 2.465 millones de euros".
Además, "si suponemos que las bases de cotización aumentan al mismo ritmo que los salarios, entonces los ingresos por esta vía subirán un máximo de 1.028 millones de euros", mantiene el subdirector de Fedea.
Como conclusión, Conde-Ruiz cree que es imposible conseguir un aumento de casi 7.000 millones de euros. De modo que se confirma "que estos presupuestos son muy optimistas en la parte de los ingresos".
Estos presupuestos dejan entrever que las elecciones están cerca: "¿Qué pasa si luego no se consigue el objetivo de ingresos? Pues estamos en elecciones y ya lo arreglará quien gane".