Ni un camión en las carreteras españolas. Ese es el propósito de los transportistas de mercancías que, con la convocatoria de varias huelgas, pretenden frenar la 'crisis' en la que está envuelta el sector. La gota que ha colmado el vaso y les ha puesto en 'pie de guerra' ha sido la subida del precio de los carburantes.
Primero fueron los pescadores con una "huelga ilimitada" iniciada en varios puertos españoles del mar Mediterráneo, ahora son también los transportistas. Parece que los parones de los camioneros van a ser noticia durante el mes de junio, o al menos los quince primeros días.
Varias asociaciones y plataformas reivindican -aunque con distintos puntos de vista- la necesidad de frenar la crisis que vive el sector del transporte en España (por Europa las cosas 'pintan' del mismo color). Para ello, exigen el cumplimiento de la normativa 'antidumping', específica para el transporte de mercancías por carretera, y que tienen en cuenta los costes mínimos de explotación del vehículo.
Las reivindicaciones es que sean realmente de obligado cumplimiento y que se sancione a quien no la respete. Sin embargo, la Dirección General de Transportes parece no tener intención de dar su brazo a torcer.
Otro de los puntos 'negro' del sector es el vinculado a la subida de los precios del carburante. Las quejas están muy unidas precisamente a ese coste mínimo de explotación y a estas alzas del gasoil. Las últimas subidas del precio del carburante han obligado a los camioneros a reivindicar ante las autoridades al menos un precio estable del carburante, con su procedente revisión semestral.
Baile de fechas
Las movilizaciones del sector se van a realizar en diferentes fechas. Parece que entre los propios representantes de plataformas y asociaciones del sector no hay acuerdo. Unos reclaman el 6 de junio, mientras otros prefieren el 8.
Por ejemplo, la 'Plataforma de defensa del sector del transporte de mercancías por carretera nacional e internacional' ha convocado a un paro nacional indefinido a partir del 6 de junio a los traders, cooperativas, flotas, agencias y operadores responsables del sector de toda España. Reivindicación que, según su coordinador, Antonio Llanos, quieren hacer extensible a Europa: "ya hemos establecido contactos para que no sólo sea en España, sino a nivel europeo. Nuestras reivindicaciones son importantes y muestran cómo ha evolucionado esta crisis en una catástrofe".
Según las estimaciones de Llanos, la huelga que se ha convocado desde Plataforma, podría estar secundada por cerca de "un millón de vehículos" (incluidos los que apoyarán la iniciativa por "simpatía"). Toda una movilización no solamente contra el alza del precio de los carburantes sino contra "la necesidad de cumplir un mínimo precio que permita cubrir los costes".
Además, a propósito de las declaraciones realizadas tanto por Pedro Solbes como por Manuel Chaves sobre el exceso de transportistas y la necesidad de que se reduzcan, Llanos considera que "precisamente el exceso está en la cantidad de funcionarios incompetentes y políticos corruptos que no son, como nosotros, los que mueven precisamente la economía".
FENADISMER, negociando en el Comité
Y la otra fecha alternativa es el 8 de junio. Esta es la defendida por la Federación Nacional de Asociaciones del Transporte de España (FENADISMER). Precisamente en este momento, los representantes de la Federación están negociando en el Comité Nacional del Transporte un acuerdo por el que ajustar sus reivindicaciones tanto sobre la normativa 'antidumping' como la necesidad de ajustar las subidas de los precios de los carburantes, una de sus principales reivindicaciones.
De momento y a la espera de que concluya dicha reunión, la huelga sigue convocada para el 8 de junio.
Sin embargo, las discrepancias entre ambas organizaciones es más que evidente: mientras que Plataforma califica a FENADISMER como "falsa asociación, que sólo obedecen a intereses particulares y no representan realmente a los transportistas", esta Federación directamente no tiene conocimiento de la Plataforma ni de sus quehaceres.