La Delegación de Gobierno en Melilla ha difundido las imágenes de la llegada de una patera de inmigrantes subsaharianios el pasado 5 de julio a la playa de San Lorenzo para "probar la agresividad de los inmigrantes". Basándose en el vídeo de la interceptación, en el que se aprecia cómo un Guardia Civil vacía un extintor apuntando a la embarcación, aseguran que "amenazan con quemar gasolina y balancean a los niños".
"Sus ocupantes utilizaron bidones de gasolina y a los niños como amenaza para paralizar los intentos de interceptación por parte de la Guardia Civil", asegura Delegación de Gobierno en una nota de prensa. Y sigue: "En su ánimo por forzar a toda costa la entrada de la patera en Melilla sus pasajeros amenazaron, mediante gestos inequívocos, a la Guardia Civil con tirar a los menores de más corta edad al agua", aseguran.
"Atención, tenemos niños"
En el vídeo se escucha como uno de los 15 inmigrantes a bordo de la patera dice en francés "atención, tenemos niños" y al poco una mujer alza a uno de los menores fuera de la borda, aunque por las imágenes no puede apreciarse si es una amenaza o si buscaba mostrar a los agentes que en la barca iban niños.
El debate sobre si está justificada la actuación de la Guardia Civil ha corrido por las redes sociales. Según Delegación de Gobierno de Melilla, esas imágenes demuestran que "las mujeres amenazaron con arrojar a los niños al agua si la Guardia Civil se acercaba o interceptaba la patera, mientras que los hombres, con el mismo objetivo, desafiaron a los agentes con prender fuego a la embarcación con la gasolina".
Denunciar la agresividad
Aseguran que "en las últimas fechas se han producido en Melilla varios casos similares". Con este vídeo pretenden remarcar "la relevancia demostrativa de las circunstancias que acompañan la extrema presión migratoria actual que vive Melilla".
El delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, denunciaba el pasado julio la "agresividad" con la que intentan entrar los inmigrantes en la ciudad y ha asegurado que "no van a consentirse las novedosas prácticas de amenazas y presión a las fuerzas de seguridad del Estado que vienen protagonizando últimamente, y en mayor medida, los inmigrantes que intentan acceder a Melilla".
El Barkani, primer musulmán delegado de Gobierno en España, condenaba "a quienes respaldan el quebrantamiento de las fronteras y consciente o inconscientemente cooperan de tal modo con las mafias que se lucran de la explotación y tráfico de seres humanos".
El delegado del Gobierno también subrayó, una vez más, la "gran labor" que realiza la Guardia Civil en defensa de la frontera sur europea o, lo que es lo mismo, "las lindes marítimas y terrestres de Melilla".