Plataforma per la Llengua, entidad catalana subvencionada por el Govern, se ha visto envuelta en la polémica tras señalar en su informe anual a los comercios y empresas que no rotulan y etiquetan en catalán.
La Generalitat sanciona el incumplimiento de la ley 1/1998 de política lingüística con una multa de 10.000 euros a aquellos que solo marquen sus paneles en castellano. Conocida como la 'ONG del catalán', en su informe muestra un cuadro en el que marca con una cruz roja las marcas que hacen caso omiso a esa norma.
Danone, Gillette, Coca-Cola, Fairy, Nutrexpa, Durex, Henkel, Dani, Casa Tarradellas, Nestle, Don Simon, Coca Cao, Capofrío, Bimbo, Dodot, Fanta y Leche Pascual son las marcas valoradas en negativo en el 'Informe CAT. 50 datos sobre la lengua catalana'. Codorniú, Cacaolat, Sony, Freixenet, Vichy Catalán, Frit Ravich, Damm, San Miguel, Fagor, Moritz, Armand Basi, Whirlpool y Taurus, al contrario, aprueban.
Plataforma per la Llengua señala que el 94% de los productos no respeta dicha ley y establece que, según datos de una encuesta del Ayuntamiento de Barcelona, el 32% de los comercios de Barcelona no promueven la inmersión lingüística.
Tras reflejarse este informe en varios medios, la plataforma, a través de su página web, ha querido desmentir las acusaciones "falsas" que les acusan de delatores y ha matizado que el único objetivo del informe es informar de la situación del catalán en diferentes ámbitos, y "la empresa y el consumo es un ámbito importante".