España

La Fundación Ideas destituye a Carlos Mulas por los pagos a la falsa columnista Amy Martin

Jesús Caldera, máximo responsable ejecutivo de la Fundación Ideas, vinculada al PSOE, ha destituido este miércoles al director de la fundación, Carlos Mulas, y estudia emprender acciones legales contra éste tras verificar que había cobrado por trabajos que firmaba bajo el seudónimo de Amy Martin. Mulas fue subdirector de la Oficina Económica del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero en su primera legislatura, miembro del comité de redacción de los programas socialistas y economista de cabecera de Ferraz. | El comunicado de Jesús Caldera | Mulas y Martin: un lucrativo negocio en la prensa

"He tomado esta decisión tras verificar las informaciones que apuntaban a la falsa autoría de una serie de trabajos pagados por la Fundación a quien firmaba con el nombre de Amy Martin", asegura el vicepresidente ejecutivo en un comunicado.

Caldera ha expresado su "estupor" ante lo que considera una "gravísima quiebra" de la confianza depositada en el que hasta hoy ha sido su director.

"Su actuación resulta inconcebible, tanto por su solvencia intelectual y su excelente currículo académico, como por el hecho de que desde el lunes ha venido reiterando su versión sobre la autoría de los citados trabajos", subraya.

"No se va a defraudar ni un euro, ya que vamos a recuperarlo todo", ha asegurado sobre los 50.000 euros que Mulas se habría embolsado.

"No hay nada ilegal"

Caldera ha puntualizado que "no hay nada ilegal" en el sentido de que los trabajos se han facturado, es decir, que los artículos en cuestión se han publicado. Lo que ha habido es, según reitera, "una ruptura de la confianza".

"El PSOE contrata con quien considera oportuno, siempre que respete los procedimientos legales, y en este caso se han respetado a ultranza, de forma total y clara", abunda Caldera.

El vicepresidente de la Fundación Ideas ha zanjado el asunto resaltando que ya se está llevando a cabo una investigación "a fondo" y de la que informará debidamente cuando se tenga el resultado.

Se abre una investigación

Por todo ello, Caldera ha ordenado una investigación "inmediata y exhaustiva" sobre la gestión de Carlos Mulas, sin perjuicio de que reintegre las cantidades facturadas en los años 2010 y 2011 a nombre de Amy Martin, un autor supuestamente ficticio.

"La Fundación ha puesto el caso en manos de sus abogados para que estudien las posibles acciones legales contra el Sr. Mulas", concluye el comunicado.

La polémica saltaba este mismo miércoles cuando el diario El Mundo publicaba que la Fundación Ideas estaba pagando 3.000 euros por artículo a una persona llamada Amy Martin. Persona que los propios trabajadores de la fundación aseguraban que no existía y era tan solo una tapadera. Las sospechas se centraron enseguida sobre el director de la Fundación del PSOE, Carlos Mulas, quien tiene registrado a su nombre la marca comercial y logotipo Amy Martin.

Los trabajadores aseguran que todo era una estratagema de Mulas para hacerse con un sobresueldo y así completar sus honorarios mensuales, que ascienden a 5.625 euros al mes. En concreto se le pagaba a la autora por cada pulsación en el teclado 16 céntimos y si era por copia en inglés 10 céntimos, según los datos de las facturas.

Adalid anticorrupción

Mulas publicó en 2011 un libro contra la corrupción, una obra centrada en la situación de Iberoamérica pero cuyas conclusiones, según la propia Fundación, trascienden "las fronteras de una determinada región".

El trabajo se titula 'Corrupción, cohesión social y desarrollo: El caso de Iberoamérica', y fue realizado por un grupo de expertos bajo la dirección de Mulas, que es también profesor titular de la Universidad Complutense de Madrid, y por José Antonio Alonso, catedrático de este mismo centro.

La Fundación Ideas mantiene en su web una breve reseña del libro. En ella se explica que es un análisis "en profundidad" del problema de la corrupción, sus causas y "modos de combatirla". "Por la oportunidad y relevancia del tema y por el rigor con que se aborda, el libro constituye una aportación relevante en el panorama internacional", se añade.

También se habla de la obra en la página en internet del Fondo de Cultura Económica, editor del libro. Se explica que una de las conclusiones del trabajo es que la corrupción "se resiste a desaparecer" y que "ningún país" está libre de ella, por lo que el objetivo no debe ser tanto tratar de eliminarla como "reducir los espacios" para que se produzca.

"Reducir los espacios de oportunidad que el marco institucional proporciona al surgimiento de prácticas corruptas, creando mecanismos para identificar, perseguir y penalizar esas prácticas. El presente libro analiza en profundidad este problema", se dice en la web.

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