
Después de dos años de caídas, los ingresos por intereses de los hogares aumentaron un 25,4% en 2011 hasta casi alcanzar los 23 mil millones de euros, cifra que representa un 41,6% de las rentas de la propiedad que recibieron las familias el pasado año.
En 2011 los activos financieros que pagan intereses sirvieron de refugio al ahorro familiar, que eligió como destino preferente los depósitos bancarios y el nuevo producto estrella del pasivo bancario, los pagarés. Sin duda, la competencia de bancos y cajas por captar ahorro tuvo algo que ver en esta dinámica, como demuestra el que el tipo de interés sintético de los depósitos bancarios aumentó en 2011 por primera vez desde 2008, situándose en el 1,63%, lo que representa una subida del 13,3% en un año.
Por el contrario, en 2011 continuó el descenso de las rentas de la propiedad distintas de intereses, que cayeron un 2,7%, encadenando el tercer año consecutivo a la baja. Esta disminución refleja, por un lado, el continuo declive de las rentas inmobiliarias, ya que en 2011 el precio medio del alquiler cayó un 6,6%. Por otra parte, la renta variable también sufrió correcciones el pasado año, provocando que las familias huyeran de la inversión en acciones y que el patrimonio de los hogares invertido se desplomara un 17,2% en 2011.
Mal comienzo de 2012 para los ahorradores
Todo apunta, sin embargo, a que los ahorradores no correrán la misma suerte este año, ya que ni tan siquiera la necesidad de las entidades financieras por captar pasivo está evitando el descenso generalizado de los intereses pagados por las cuentas de ahorro, plazos fijos y el resto de productos remunerados.
Aunque el comienzo del año fue bastante tranquilo, tras la publicación de los nuevos límites del Banco de España a la remuneración de los depósitos a comienzos de abril, prácticamente no ha habido un día en le que alguna entidad no anunciara rebajas en la rentabilidad de los productos de ahorro.
Algunos ajustes han sido especialmente significativos, como el realizado por el Banco Finantia Sofinloc, entidad que hasta la fecha ofrecía los tipos más altos del mercado bancario, y que en abril dejó de comercializar algunos de los que ocupaban la posición de mejores depósitos del mercado, como el Depósito 4,60% TAE a 12 meses.
Otros anuncios destacados han sido la rebaja efectuada por el BBVA a la remuneración de dos de sus depósitos a plazo fijo, o el descenso de la rentabilidad del conocido Depósito Gasol de Banco Popular, que en el caso del plazo a 12 meses pasó a remunerar el 2,65% TAE desde el 3% anterior. Igualmente, la Caixa redujo en 40 puntos básicos, hasta el 2,80% TAE, la rentabilidad de su renovado Depósito In, dirigido a nuevos clientes.
Estas entidades no han sido ni mucho menos las únicas, ya que la caída de las rentabilidades se ha extendido en las últimas semanas a lo largo del mercado de cuentas y depósitos bancarios, complicando un poco más el panorama para las familias que buscan sacar partido a sus ahorros.