Después de un año de incrementos en las comisiones bancarias, a comienzos de 2012 estamos viendo que, en algunos casos, esta subida se ha parado. Así, de buena gana, podemos afirmar que en lo que respecta a las cuentas, los precios de los servicios bancarios han dejado de crecer entre diciembre de 2011 y febrero de 2012, según la media calculada por el Banco de España.
Sin embargo, menos suerte han tenido las comisiones por tarjetas, siendo las únicas que han sufrido alguna que otra subida en sus tarifas.
Para empezar, veamos qué comisiones nos aplican las entidades financieras por la prestación de servicios como el mantenimiento de la cuenta bancaria, transferencias o ingresos de cheques, entres otros. Aprovecharemos para recordar la media que se paga por ellas a las entidades españolas, que es igual a la de hace tres meses:

Cada vez más, las entidades se unen a la tendencia de premiar a los clientes con la exención del pago de determinadas comisiones, como las de mantenimiento y administración, y un determinado número de transferencias menores a 50.000 euros. Así se rebajan o eliminan las comisiones a clientes que mantienen el saldo medio de la cuenta superior a cierta cantidad, si es menor de 26 años o si tiene la nómina domiciliada.
Por el contrario, la comisión bancaria que sí ha sufrido una ligera variación al alza este último trimestre es la comisión por utilización de tarjetas y disposición de efectivo desde cualquier cajero. Ha habido un incremento de 0,14 céntimos en el caso de las tarjetas de débito (20,39 euros) y en 0,22 céntimos en las de crédito (37,93 euros). Comparando con las cuotas anuales del pasado año, en 17,30 euros y 34,39 euros respectivamente, vemos que este tipo de comisiones no han dejado de aumentar.
El valor medio que se cobra sobre el importe por la disposición de efectivo desde un cajero de acuerdo al tipo de tarjeta también ha sido modificado ligeramente al alza. En el caso de las tarjetas de débito, la subida se recoge en la siguiente tabla:
Una evolución alcista similar se observa en el caso de las tarjetas de débito:


Como se puede ver en las tablas, los incrementos sufridos no son muy elevados, pero se trata de comisiones que forman parte de nuestro día a día, por lo que su incremento es aún más significativo.
Las entidades financieras han cesado, por el momento, el incremento de las comisiones en las cuentas, aunque observados los datos de aumento desde el año pasado, podemos agradecer que nos proporcionen este corto respiro.
Por otro lado, el incremento del uso del servicio de las tarjetas de crédito, probablemente debido a la falta de liquidez de muchos clientes, ha hecho que las entidades vean en este producto una buena oportunidad para incrementar sus ingresos.
Ante la subida de las comisiones, que está siendo especialmente intensa en el caso de las tarjetas, es importante ser muy consciente de que estamos pagando un precio por los servicios asociados al producto. Por ello, es importante que tengamos presente qué servicios utilizamos y qué producto nos permite disfrutar de ellos a un menor coste.
En este sentido, conviene recordar que algunas tarjetas incluyen promociones que pueden llegar a ser muy ventajosas, como ocurre con los descuentos por compras en estaciones de servicio o las devoluciones de un porcentaje determinado de las compras. Solo así se conseguirá un uso óptimo de la tarjeta, a pesar del inevitable aumento de las comisiones.