Intentar escapar de Madrid el último viernes de julio ha sido toda una odisea. Kilómetros y kilómetros de atascos interminables.
Retenciones que acaban con la paciencia de muchos conductores. En el sur, en la A-49 entre Sevilla y Huelva, todos querían llegar cuanto antes a la playa.
Larga espera
Horas y horas metidos en el coche sin poder moverse. Largas esperas también en las carreteras de Cataluña, Levante y norte de España.
Nadie se libra de la operación salida. Menos mal que todos los atascos conducen a las vacaciones.