El ejercicio de 2006 fue el último año en el que los partido políticos en España pudieron recibir grandes cantidades de donaciones anónimas, ya que en 2007 se reguló por ley esta situación. Sin embargo, se trató de un año muy lucrativo para el Partido Popular que recibió más de tres millones de euros.
En total, fueron 3.106.049 millones de euros con los que los populares pudieron comprar la sede del partido en la calle Génova de Madrid, hasta entonces en alquiler, según recoge el diario El País.
Al tratarse de doncaciones opacas, el Tribunal de cuentas no ha podido establecer si estas aportaciones sobrepasaron el límite de la legaidad, es decir, 60.000 euros por persona y año. "Dada la naturaleza de las aportaciones anónimas, no se ha podido comprobar el cumplimiento a nivel individual del límite legal establecido para las aportaciones privadas", reza el informe que este tribunal elabora actualmente.
Una financiación ya prohibida
Además, de estos tres millones, el PP recibió 634.262 aportaciones nominales. Por su parte, el PSOE recibió 558.975 euros anónimos.
Desde la aprobación en julio de 2007 de la Ley de Financión de Partidos, impulsada tras el caso Filesa, no se ha dado este tipo de financiación que copaban PP, PSOE, CIU y PNV.
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