
Las compañías que enfocan su actividad en el crudo ya cotizan con un descuento en precio del 29 por ciento de media desde junio.
Más de 60 dólares de caída después de que se iniciaran los descensos en el precio del crudo, la denominada como crisis del petróleo ha avanzado hacia un nuevo estadio. Sus perniciosos efectos sobre las compañías que enfocan su actividad esta materia prima (además de sobre las economías productoras de la misma) son cada vez más evidentes en el mercado, donde los analistas continúan con reducciones de sus valoraciones -Nomura ha sido una de las últimas en hacerlo- para ajustar la caída bursátil de los últimos 7 meses.
Sin embargo, al igual que en la película de James Bond El mundo nunca es suficiente, la oscilación que ha registrado el precio del crudo en los últimos meses no parece bastar. Desde el 19 de junio de 2014, fecha en la que el crudo registró su nivel más alto en 13 meses, las caídas registradas en bolsa ya han generado pérdidas que se acercan a los 475.000 millones de dólares en capitalización en las petroleras más grandes. Y, a pesar del rebote del 5 por ciento desde mínimos del crudo, la sangría podría continuar. Goldman Sachs ha recortado sus previsiones sobre crudo para 2015 hasta los 40 dólares por barril. Y es que, "los mercados de petróleo están claramente sobre abastecidos", señala Nitesh Shah.
En este contexto las firmas petroleras ya cotizan con un descuento en precio del 29 por ciento de media. ¡Pero cuidado! No es oro todo lo que reluce. El descenso que han vivido las firmas que operan con esta materia prima no supone comprarlas más baratas. Las estimaciones de beneficio que se barajan para las 10 firmas más grandes se han reducido en casi 50.000 millones de dólares -un 39 por ciento- en el mismo periodo de tiempo, es decir, han registrado un descenso superior, provocando que, en proporción, se pague más por ellas.
Un ejemplo de ello lo dan las diez empresas más grandes del sector. Su ratio de PER, que pone en relación el beneficio bruto de la compañía con el precio que se paga por cada uno de sus títulos, es superior al registrado antes de las caídas. Y no sólo eso. Según el consenso de mercado, la mayoría de ellas cotiza con un multiplicador de beneficios por encima de su media histórica de los últimos 10 años (ver gráfico). Sólo Gazprom y EOG Resources escapan a esta tendencia al cotizar más baratas que durante la media de los últimas diez años, pero sólo en el caso de la firma estadounidense la media de firmas de inversión recomienda tomar posiciones.
¿Cambio de tendencia en bolsa?
"El petróleo ha acelerado su tendencia bajista perdiendo sus niveles de soporte clave", señala Carlos Almarza, analista de JM Kapital Eafi, "y si prestamos atención al sectorial Stoxx Europe 600 Oil & Gas, podemos ver cómo se ha confirmado un patrón de giro de la tendencia que es conveniente vigilar a pesar del repunte del jueves", afirma el mismo experto.
No obstante, "la situación actual es insostenible", afirma Nitesh Shah (ETF Securities), que señala además que "el ajuste del suministro de petróleo en EEUU y otros países productores podría ser un precedente al posible recorte de la oferta por parte de la OPEP en su reunión de junio de 2015".
En este sentido, y a pesar de que se pague más por las compañías petroleras atendiendo a su ratio de beneficios, algunos expertos de la inversión comienzan a divisar cambios de tendencia. Bank of America, entre otros, destaca como una de las ideas de inversión más interesantes para este año al sector de la energía. Y es que repuntes del 6 por ciento en el crudo como el del jueves a raíz de la confirmación de la reactivación del consumo tras publicarse el Libro Beige, suponen una pequeña luz en la oscuridad.
Luces que encuentran apoyo en las altas rentabilidades por dividendo que registran ahora algunas petroleras tras las caídas bursátiles. Es el caso de pequeñas empresas como Atlas Resource, BreitBurn Energy o Legacy Reserves en EEUU en las que el rendimiento de su pago supera el 20 por ciento.
Quizás por ello, en el último trimestre de 2014, los fondos de inversión han comenzado a mover su dinero hacia el sector de la energía, que ganó un 2,3 por ciento de peso en sus carteras según recogen desde Bloomberg. "Es sorprendente e interesante a la vez. Especialmente que lo hicieran a lo largo de ese periodo de tiempo", señala Sam Peters, gestor del fondo LM Clearbridge Value Fund especializado en renta variable de EEUU. "Sin embargo, seguro que este aumento en la exposición bruta responde a movimientos sobre pequeñas y medianas empresas y que no tiene gran repercusión sobre los precios del crudo", afirma el mismo experto.