
El Gobierno ampliará la garantía del Estado para el déficit de tarifa en 4.000 millones de euros más como consecuencia del desvío del agujero eléctrico provocado en 2012, principalmente por la desviación de las primas al régimen especial -renovables y cogeneración- y por una caída de la demanda mayor de lo esperado.
Fuentes del sector explicaron a elEconomista que los ministerios de Industria y Economía trabajan en el desarrollo normativo para tramitar esta ampliación y que se recogerá en la inminente reforma energética que previsiblemente se aprobará a lo largo de este mes.
En primer lugar, el ministro de Industria, José Manuel Soria, impulsará un real decreto para reconocer este exceso de déficit que mantienen las eléctricas en sus balances y que asciende a 4.035,03 millones de euros, según el último informe de la Comisión Nacional de la Energía (CNE).
A continuación, Economía e Industria deberán consensuar una normativa que modifique el Real Decreto 437 de constitución del Fondo de Amortización del Déficit de Tarifa (Fade), que se ha encargado en los últimos años de la emisiones de este desfase financiero y fija las condiciones y los plazos de las mismas.
La normativa actual recoge que el saldo vivo de la deuda con aval del Estado es de 22.000 millones de euros, ampliables hasta los 25.000 millones. Como el desvío del agujero eléctrico ha superado las previsiones, se hace necesario un nuevo real decreto que recoja la totalidad del exceso de déficit hasta los 26.000 millones de euros.
Fade está gestionado por una firma de titulización de activos (TdA) y supervisado por una comisión interministerial formada por Industria y Economía. El primer paso para las colocaciones son las cesiones de los derechos de cobro a este fondo. El último informe de la Comisión Nacional de la Energía sobre el déficit de tarifa apunta que el déficit generado en 2012 asciende a 5.609 millones de euros, de lo que 1.500 millones ya han sido cedidos a Fade para su posterior colocación en el mercado.
De esta manera, el importe que aún ostentan las empresas eléctricas (pendiente de formalizar su cesión al mencionado fondo) asciende a más de 4.000 millones.
Los datos del déficit recientemente aprobados por la Comisión Nacional de la Energía (CNE) a través de la liquidación 14 son lo que sirven al Ejecutivo para comenzar el proceso de titulización del déficit de tarifa, al igual que ha ocurrido otros años. Además, el Real Decreto Ley para Empleados del Hogar aprobado a finales de diciembre, por el que se suprimieron los topes del déficit de tarifa, establecía que se compensaría a las eléctricas "el desajuste del déficit resultante en la liquidación definitiva". En la orden de tarifas aprobada el pasado mes de febrero, el Ministerio precisó que se compensaría el déficit resultante de la liquidación 14 que se conoció a finales de abril y que da la cifra de los 4.035,03 millones de euros.
El consumidor paga la deuda
Por otro lado, el consumidor ya ha soportado una gran parte de la losa que supone el déficit de tarifa -aprobado en el 2000 para no subir la luz por encima de la inflación-. A través de este mecanismo se reconocía una deuda con las eléctricas que se devolvería en las décadas sucesivas, con los consiguientes intereses, como si de una hipoteca se tratara.
Según el último informe de la CNE, desde el 2003 hasta mayo de este año, el importe satisfecho de esta deuda a través del recibo de la luz asciende a 11.823 millones de euros.
Uno de los principales problemas se centra en los altos intereses a los que se ha colocado el déficit en el mercado, sobre todo en las emisiones del pasado año en plena crisis de la deuda soberana y con la prima de riesgo disparada.
Por ello, una nueva disputa entre Industria y Hacienda es la presión que ejerce Soria para que los Presupuestos Generales del Estado acojan los intereses de las nuevas emisiones. Cabe destacar también que el Gobierno tiene que hacer frente a vencimientos de deuda del déficit de tarifa de más de 2.000 millones para este ejercicio y por otro montante similar para 2014.