
Viena, 22 oct (EFE).- Los precios del petróleo oscilaron toda la semana entre subidas y bajadas en una situación de compás de espera ante el resultado de la cumbre que celebran este fin de semana los líderes de la Unión Europea para debatir soluciones a la crisis de deuda de la zona euro.
Al cerrar el viernes los mercados, las cotizaciones de los crudos de referencia internacional arrojaban valores similares a los del comienzo de la semana.
El barril Brent, de referencia en Europa, para entrega en diciembre marcó un precio de 109,56 dólares en el Intercontinental Exchange Futures (ICE), con una pérdida de apenas 60 centavos respecto al precio del lunes.
Ese precio supone una caída del 4,4 por ciento respecto a la cotización que marcó el Brent, pero de entrega en noviembre, el viernes pasado.
Por su parte, el Texas estadounidense cerró la semana a 87,4 dólares por barril, con una leve ganancia del 0,6 por ciento respecto a la semana anterior.
También el crudo de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) alternó subidas y bajadas, aunque la cotización del jueves, la última hecha pública, marcó una depreciación del 1,6 por ciento respecto al cierre de la última semana.
Desde que los mercados abrieran sus puertas el lunes, las operaciones petroleras estuvieron marcadas por el nerviosismo sobre lo que se pueda decidir este fin de semana en Bruselas.
Así, el lunes, ni siquiera unos datos macroeconómicos en Estados Unidos mejor de los esperados, como el crecimiento del 0,2 por ciento de la producción en industrial en septiembre, evitaron que la semana comenzará con las cotizaciones del "oro negro" a la baja.
Ese nerviosismo se transformó en intranquilidad al advertir el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, que en la reunión de mañana en Bruselas se vaya a cerrar un solución definitiva a la crisis.
Las buenas noticias sobre Estados Unidos siguieron llegando el martes, con el anuncio del Índice de Precios al Productor (IPP) y la mejora de la confianza de los constructores.
Sobre esa luz se arrojó la sombra de que la economía china creció un 9,1 por ciento en el tercer trimestre sobre el mismo periodo de 2010, pero se ralentizó cuatro décimas respecto al segundo, un dato que inquietó a los inversores, pero que no evitó que el crudo se apreciara el martes.
Las especulaciones sobre lo que pueda ocurrir en la cumbre de dirigentes europeos siguieron alternándose con nuevas noticias económicas que influyeron notablemente en los precios del crudo.
Así, los precios del crudo cayeron alrededor del 2,5 por ciento el miércoles, una jornada en la que la agencia Moody's rebajó la calificación de la deuda soberana de España y se conoció que las reservas de crudo en Estados Unidos, pese a haber bajado la semana pasada, están por encima del promedio para esta época del año
Menos impacto tuvieron la intervención militar turca en Irak, para atacar las bases en ese país del grupo armado Partido de los Trabajadores del Kurdistán, e incluso la detención y muerte del dirigente libio Muamar el Gadafi.
El viernes, el foco de los inversores siguió puesto sobre los problemas de deuda en Europa, aunque los crudos Brent y Texas reaccionaron de forma distinta esa jornada, con el primero marcando una leve depreciación del 0,18 por ciento mientras que el Texas se encareció un 1,54 por ciento.
Por Antonio Sánchez Solís.
Relacionados
- Digital+ cambia de nombre y pasará a llamarse canal+
- Euro/Corona checa: aún puede llamarse pull-back
- La coalición de Bildu y Aralar podría llamarse 'Amaiur'
- La coalición de los integrantes de Bildu y Aralar podría llamarse 'Amaiur'
- La coalición de los integrantes de Bildu y Aralar podría llamarse 'Amaiur'