Madrid, 25 feb (EFE).- El Gobierno limitará con carácter temporal, a partir del 7 de marzo, la velocidad máxima en todas las autopistas a 110 kilómetros por hora, dentro de las medidas de ahorro energético que se van a tomar para mitigar los efectos de la escalada del precio del petróleo por el conflicto de Libia.
Con esta limitación de velocidad el Gobierno calcula que se ahorrará un 15 % en el consumo de gasolina y un 11 % en el de gasóleo.
La reducción de velocidad en las autopistas y autovías de 120 a 110 kilómetros por hora durante un año supondrá un ahorro de 18 millones de barriles de petróleo que, al precio actual y al tipo de cambio existente, son unos 1.400 millones de euros, según fuentes del Gobierno.
Otra de las medidas estudiadas hoy por el Consejo de Ministros para ser aprobadas el próximo viernes es reducir las tarifas de Renfe hasta un 5 % en media distancia y cercanías -tanto en los billetes sencillos como en los abonos-, también a partir del 7 de marzo y de forma temporal.
Estas son las dos principales iniciativas -junto al aumento del porcentaje obligatorio del 5,8 % de consumo biocarburantes hasta el 7 %- para hacer frente a la costosa escalada del precio del crudo que esta semana rozó los 120 dólares el barril.
Elevar al 7 % el porcentaje de biocarburantes en los combustibles de automoción (gasolina y gasóleo), representa un ahorro de 160 millones de euros al año.
En el contexto de esta subida, el precio de la gasolina igualó esta semana el máximo que marcó el 20 de enero, al venderse a una media de 1,285 euros por litro, mientras que el gasóleo se encareció un 1 %.
El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, encargado de presentar hoy estas controvertidas medidas, descartó problemas de suministro a raíz de esta crisis y apuntó que con estas iniciativas se podrá afrontar la "abultada" factura energética.
Cada subida de 10 dólares en el precio del barril eleva la factura energética en 6.000 millones de euros anuales, unos 500 mensuales -apuntó Rubalcaba- quien descartó que el incremento del crudo "vaya a influir en la recuperación económica".
Por ello, tampoco se modificarán los Presupuestos Generales del Estado de 2011 ni se corregirá la previsión de crecimiento para este año, fijada en el 1,3 %.
Para poner en marcha el cambio de velocidad máxima, que no influirá en el carné por puntos pero sí en las multas, el Gobierno adaptará las señales de tráfico.
En este punto, el Ministerio de Fomento explicó que se gastarán como máximo 250.000 euros en adaptar provisionalmente las 6.000 señales de velocidad existentes en las autopistas y autovías de la Red de Carreteras del Estado, en las que se colocará una pegatina con el nuevo límite.
Las mismas fuentes calificaron dicho coste de "irrisorio" en comparación con el potencial beneficio que se obtendrá con el ahorro de combustible.
En cuanto a la rebaja en Renfe, que no afectará a los trenes de larga distancia ni al AVE, irá acompañada de campañas para potenciar el transporte público y el Gobierno espera que pueda servir de ejemplo para Comunidades Autónomas y Ayuntamientos.
"La promoción del transporte público siempre es bienvenida, pero ahora es necesaria", agregó Rubalcaba.
También se elevará del 5,8 % al 7 % el objetivo de biocarburantes, una medida que sí podría tener carácter definitivo.
Ante este cambio del porcentaje obligatorio de consumo de biocarburantes, el Gobierno intensificará el seguimiento de los precios y los márgenes de distribución para verificar que se cumplen "estrictamente" los criterios de competencia.
El Ejecutivo prevé crear un grupo de trabajo con los distribuidores de carburantes para seguir "día a día" la evolución de las energía mientras dure la crisis.
El plan de ahorro energético se aprobará en el Consejo de Ministros del próximo viernes e incluirá también medidas que afectarán a la iluminación de los edificios públicos y de las ciudades.
Las reacciones políticas a las medidas no se han hecho esperar y desde el PP han considerado que la reducción de la velocidad es "contraria" a la seguridad vial, ya que aumentará la incertidumbre de los conductores.
Los principales clubes automovilistas españoles también rechazaron la decisión del Gobierno por ser "ineficaz" a su juicio para el ahorro de energía.
Para los ecologistas de Greenpeace el Gobierno "ha vuelto a perder la oportunidad" de establecer medidas estructurales de largo plazo para reducir el consumo de petróleo.
Por el contrario, las asociaciones de consumidores han calificado de "oportunas" y "razonables" las medidas y han deseado que la reducción del 5 % en los billetes de Renfe en media distancia y cercanías se extienda también al metro y autobuses urbanos.