¿Por qué es tan relevante la formación en inteligencia emocional?
Decía Daniel Goleman que las empresas nos contratan por nuestras habilidades técnicas y nos despiden por nuestras incompetencias emocionales. Creo que la relevancia se encuentra en las propias características del trabajo moderno: se nos piden, ya que son necesarios, ciertos conocimientos técnicos, pero lo que marca la diferencia son las habilidades que desplegamos en nuestro trabajo diario y nuestra relación con los demás como la flexibilidad, iniciativa, capacidad de trabajo en equipo.... Unas habilidades de corte integral (son personales y profesionales) que aportan un enorme valor al profesional y a la empresa que cuenta con él.
¿Cree que los beneficios de esta formación se pueden extender a todo tipo de personas y profesionales? ¿Por qué las empresas no apuestan por este tipo de cursos para todos sus empleados?
¿Qué sentido tiene formar a solo un 15% de las personas de una empresa? Para que una empresa funcione realmente bien, sea competitiva y cuente con un equipo realmente comprometido, hay que motivar a su activo más esencial: las personas. Para ello, no solo hay que ofrecerle buenas condiciones, sino cuidar su formación, centrándose en ellos como personas completas, no como engranajes de un puesto concreto.
Hasta ahora, era muy difícil que una compañía apostara por esta formación a gran escala debido al coste, al tiempo, a la rigidez de este tipo de cursos que siempre han sido presenciales y concentrados en un corto espacio de tiempo. Afortunadamente ahora hay en el mercado soluciones que superan estas barreras, facilitando a la empresa poder hacerlo de forma flexible, accesible y con un enfoque muy práctico.
¿Cómo puede ser eficaz una formación a distancia a través de un móvil y más en un ámbito como al inteligencia emocional?
Cuando hablamos de inteligencia emocional tenemos que bajar el concepto de las nubes. No se trata de aprender una serie de teorías o clasificaciones, sino de ver cómo aplicamos, en el día a día, una serie de habilidades concretas. En este sentido, el método que propone Digital Learning Pills es tremendamente práctico: una formación diaria, efectiva, audiovisual, con tareas y objetivos concretos para aplicar todos los días y que, precisamente gracias a los móviles, podemos hacerla accesible, flexible y cómoda. El contenido que ofrecemos está pensado para poder calar, como una lluvia fina, poco a poco, en las habilidades y competencias de las personas, desarrollándolas y mejorándolas.
¿Por qué pensaron en la educación emocional? ¿Tiene partido en España? ¿En qué países es donde más demandada esto?
Pensamos en la educación en inteligencia emocional por dos motivos: es muy necesaria y... ¡apenas se ofrecía! ¿De qué nos sirve, por ejemplo, un profesor con un gran conocimiento pero con nulas habilidades de comunicación o de empatía con sus alumnos?
Este tipo de formación tiene cabida en España, en Europa, en China y en Patagonia... ¡en el mundo entero! Vemos esta formación como un complemento esencial en toda formación.
Los países que más la demandan son justo los más sensibles al papel del profesional dentro de las organizaciones. En este sentido, es una demanda creciente en muchos países del mundo.
¿Qué tipo de contenidos tenéis?
Hemos concretado la "inteligencia emocional", un concepto teórico, en una serie de habilidades y competencias prácticas, que se aplican en el día a día. En ese sentido, estamos ofreciendo formación en Empatía, Iniciativa, Persuasión, Comunicación, Autoestima, Trabajo en Equipo....
Realmente las empresas confían en la formación emocional?
Cada vez más. Las empresas son las primeras en darse cuenta de que su principal activo son las personas y todos los esfuerzos por captar y retener el talento son pocos. Es cierto que la formación se ha impartido, de forma tradicional, centrándose en otros aspectos tal vez más técnicos pero, cada día más, se mira a la persona desde un punto de vista más completo, valorando no solo los conocimientos, sino las habilidades. Unas habilidades que se pueden desarrollar, potenciar, mejorar....
¿En qué cambia la vida de un profesional a través de la inteligencia emocional? ¿Es una formación enfocada solo a este ámbito o puede aplicarse a nivel personal?
Creemos firmemente en que la práctica de estas habilidades funciona tanto en un plano profesional como personal: son hábitos que interiorizamos y aplicamos en todos los aspectos de nuestra vida. Si aprendemos a escuchar mejor, lo haremos tanto con nuestros compañeros, como con los clientes, amigos o familia. La vida de un profesional cambia mejorando, ya que muchas de estas capacidades tienen un impacto directo en la calidad del trabajo, en la motivación y en las relaciones humanas en general.
¿Cuánto tiempo tiene que formarse una persona para adquirir los conocimientos necesarios en inteligencia emocional y ser capaz de aplicarlos? ¿Cuáles son esas habilidades básicas?
Toda habilidad se basa en la repetición de pequeños actos, de forma recurrente. En este sentido, apostamos por un periodo de 45 días, de pequeñas tareas diarias, para fomentar y desarrollar cada una de las habilidades. Lógicamente, el desarrollo completo es una labor de mucho más tiempo, pero con esta herramienta facilitamos y potenciamos la práctica y la creación de esa habilidad.
Como responsable de Formación de una gran empresa, me puede materializar que medios tengo para contrastar los resultados de los empleados tras realizar los cursos que Vds. disponen.
Para medir tanto el impacto como la satisfacción de los cursos, contamos con varios medios: seguimiento semanal del numero de días completado, control de tareas; feedback de los jefes respecto a los empleados con objetivos concretos, encuestas de satisfacción, test semanales de contenido .
Como hablamos de mejoras de capacidades, es difícil comparar profesionales de distintos sectores, alcances, y posiciones. No obstante, todas las pruebas de control, con grupos comparativos, han mostrado una mejora notable en campos tan "intangibles" como el trato al cliente, la imagen de marca, o algunos mas medibles, como el numero de sugerencias internas de mejora (después del curso de iniciativa, por ejemplo)
¿Qué magnitud tiene a día de hoy en España este tipo de formación? ¿Y fuera de España? ¿Es bien acogida por las empresas y por los trabajadores?
Ahora mismo, se imparte formación en inteligencia emocional, en liderazgo, en habilidades desde un punto de vista tradicional: seminarios, cursos presenciales, libros. El problema que tiene este sistema es que, básicamente, es ineficiente, ya que concentra una gran cantidad de información en muy poco tiempo, es de carácter teórico, y no tiene una continuidad en el tiempo. El sistema que propone DLP está siendo muy bien acogido por la metodología, la adaptación a las nuevas tecnologías, y lo práctico de su planteamiento.
Despedida
Muchas gracias a todos por el interés que habéis mostrado. Creo firmemente que cada día somos más las personas interesadas en la inteligencia emocional en la medida en que queremos dar lo mejor no solo en nuestras empresas sino en todos los proyectos vitales que emprendemos. Espero veros pronto e alguno de nuestros cursos. Un abrazo a todos. Ángel de José