Madrid, 21 oct (EFECOM).- Los expertos del Club de Madrid recordaron hoy que la mayor parte de los países productores de energía son musulmanes y advirtieron del peligro de que las democracias occidentales estén enviando un mensaje de radicalización que pueda dar lugar a un enfrentamiento entre civilizaciones.
La V Asamblea Plenaria del Club de Madrid presentó las conclusiones de los grupos de trabajo que, durante dos días, han analizado la seguridad energética, gestión de los recursos, energías alternativas y el acceso energético global, tomando como punto de partida la experiencia de Canadá, Chile, Ecuador, Islandia, Noruega, Rumanía, Sudán y Tanzania.
Los expertos subrayaron que el futuro de la energía es un problema global que debe ser tratado como tal y describieron los tres problemas que tiene que afrontar el mundo en referencia al futuro energético: la seguridad de suministro, la equidad y la sostenibilidad, esta última directamente vinculada al cambio climático.
El Club de Madrid, un foro que agrupa a ex presidentes y ex primeros ministros, advirtió de otros problemas latentes para el sector energético, como el terrorismo o el peligro de "un enfrentamiento entre civilizaciones", cuando la mayor parte de los países productores de energía son musulmanes.
Los grupos de trabajo recordaron que la franja mundial con más recursos de energías fósiles, que va desde Nigeria a Kazajistán, es principalmente musulmana, y advirtieron que sus habitantes ven cómo "el mundo está robando su riqueza" mientras las democracias no están haciendo frente a este problema.
Señalaron además que las medidas que se adopten en el futuro deben dirigirse no tanto a aumentar la producción energética como a reducir el consumo, por lo que consideraron que los líderes de las democracias occidentales deben concienciar a los ciudadanos sobre esta necesidad.
Recalcaron además la importancia de los regímenes democráticos para el desarrollo energético de los países, y argumentaron que la corrupción de los gobiernos "mina el funcionamiento de los mercados" e impide la seguridad jurídica para su desarrollo. EFECOM
ra/ero/chg