
Las compañías aéreas españolas no tienen previsto revisar a la baja, por el momento, sus tarifas, a pesar de que el precio del barril del petróleo ha caído casi 40 dólares desde que alcanzara sus máximos históricos en julio. La Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) ha advertido hoy de que el sector perderá este año 3.600 millones.
Fuentes de distintas compañías consultadas por Servimedia explicaron que antes de tomar medidas de este tipo es necesario que se confirme esta tendencia a la baja del precio del crudo.
Un portavoz de Air Europa señaló que se trata de una decisión que habrá que tomar "más adelante, cuando sea un poco más estable el precio" del petróleo. En este mismo sentido se pronunciaron desde Iberia y Spanair, que apuntaron que de momento "mantienen" las tarifas, a la espera de ver cómo evoluciona el mercado.
Finalmente, la aerolínea Vueling reconoció que el precio del barril ha bajado mucho desde los máximos alcanzados a principios del verano, si bien señaló que "sigue siendo bastante alto". Además, defendió que la competitividad de sus tarifas les deja poco margen para bajar precios.
Mala situación del sector
Giovanni Bisignani, director general de la IATA, ha hablado hoy de la situación en la que se encuentran las empresas del sector, debido a los altos precios del petróleo y la creciente caída de la demanda, lo que le llevará a perder este año 5.200 millones de dólares (unos 3.600 millones de euros), según los cálculos de la propia asociación.
"Estamos en el centro de una tormenta perfecta, en una situación muy frágil, incluso en aquellos mercados que considerábamos muy robustos, como el de Asia Pacífico", señaló Bisignani. "La combinación tóxica de altos precios del petróleo y la caída de la demanda siguen envenenando la rentabilidad de la industria", subrayó.
La previsión de pérdidas para el 2008 la basa la IATA en que el precio del petróleo se mantenga a una media de 113 dólares el barril, aclaró Bisignani.
La estimación de pérdidas para el año es algo menor del "guión más pesimista" que la organización había previsto el pasado junio, y según el cual la industria perdería hasta 6.100 millones de dólares, calculando un precio medio del petróleo de 135 dólares el barril.
Pero, sin embargo, las cifras previstas están muy por encima del guión "optimista" de sólo 2.300 millones de pérdidas, reconoció el responsable de la IATA.
Y es que el precio medio de 113 dólares por barril, a pesar de ser mejor de lo temido, "está a 40 dólares por encima del nivel medio de 73 dólares por barril de 2007". "Eso significa que este año la industria pagará una factura por combustible de 186.000 millones de dólares, es decir, 50.000 millones de dólares más que en 2007", explicó Bisignani.