Los concesionarios temen más el traslado de costes financieros que están imponiendo los fabricantes de automóviles exigiendo mayores stocks que la caída de las ventas, aseguró el presidente de la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconuato), Antonio Romero Haupold.
El presidente de los concesionarios denunció que en esta situación de derrumbe del mercado los fabricantes están imponiendo un mayor número de días de stock, al pasar de los 60 habituales a 120 días o más.
Estos 60 días, por término medio, suponen, según cálculos de Faconauto, 900 millones de euros en costes financieros, una capacidad financiera comprometida innecesariamente que corresponde a los fabricantes, declaró Romero Haupold.
200 euros más por automóvil
Estos 900 millones de euros representan el sueldo de 50.000 personas, una cifra que explica el miedo que tienen los concesionarios a esta presión financiera de los fabricantes. Este coste financiero, que representa alrededor de 200 euros por cada automóvil, será soportado, al final, por el cliente, para evitar así el cese del negocio, señaló.
Antonio Romero Haupold argumentó que los concesionarios españoles pueden afrontar una caída del mercado, porque los equipos de ventas de las redes de distribución son flexibles y pueden adaptarse a la situación.
Los concesionarios, añadió, pueden sobrevivir a las operaciones de posventa, que son las que mantiene el parque automovilístico circulante, porque pueden soportar un gran porcentaje de los gastos.
Una caída "brutal" en agosto
En relación a agosto, indicó que, junto a septiembre, hacen lo que un mes normal de ventas -como lo puede ser el de julio-, pero en el capítulo de gastos equivale a dos meses.
Romero Haupold confesó que no esperaba una caída tan brutal como la registrada en agosto, al tiempo que indicó que septiembre seguirá la misma senda y en octubre quizá se venda algo más.
El presidente de los concesionarios dijo que es poco probable que la situación mejore en lo que resta del año, y destacó la probabilidad que las ventas del canal de particulares, las consideradas rentables por el sector, caigan más del 20%.