El sector inmobiliario asegura que la liquidez de los inversores que quieren comprar en el centro de Madrid es incalculable, sin embargo, sus operaciones se ven en muchas ocasiones limitadas por la protección de los inmuebles que quieren adquirir.
Más del 60 por ciento de las parcelas del centro histórico de la capital están protegidas y en toda la ciudad el número aumenta hasta 18.915 parcelas. Aunque proteger el patrimonio histórico de una ciudad es muy importante, Felipe Iglesias, profesor titular de Derecho Administrativo en la Universidad Autónoma de Madrid, asegura que esto "no tiene sentido y además genera un serio problema de congelación arquitectónica en la ciudad".
Uno de los casos más recientes y polémicos es la reforma del Edificio España, que quiere llevar a cabo el magnate chino Wang Jianlin. El empresario compró el inmueble para rehabilitarlo y levantar un centro comercial, un hotel y pisos de lujo. Su proyecto pasa por desmontar piedra a piedra la fachada para después volver a reconstruirla con el mismo aspecto y con mejores calidades, pero esta idea no convence a la Administración, que asegura que la fachada está protegida.
Es un proyecto de grandes dimensiones, pero casos similares en edificios más pequeños y poco representativos se suceden día tras día. "No puedo calcular el número de veces que al finalizar un estudio tengo que decirle a mi cliente que las obras que quiere realizar en un inmueble no están permitidas", explica Iglesias. Lo peor de todo esto es que "el catálogo de edificios protegidos no recoge una motivación", una realidad que está ocasionando "unas cuantas demandas, que finalmente terminan como nulidades del Plan General".
Respecto a los cambios de uso, "el plan es muy restrictivo en este aspecto" y aunque el experto considera normal que se intente mantener el mix de uso terciario y residencial, el Plan es del año 1997 y por lo tanto no está actualizado a las necesidades sociales actuales. "Es un plan desfasado y muchas veces para realizar un cambio de uso se necesita modificar el Plan General", explica. "Los periodos es este caso se mueven entre el año y medio y dos años y en ese tiempo el cliente ya ha encontrado otro inmueble".