Por Carlos Ruano y Jesús Aguado
MADRID (Reuters) - El Fondo Monetario Internacional (FMI) se mostró el lunes sorprendido por la fortaleza de la economía española y elevó sustancialmente sus previsiones de crecimiento para el país, aunque advirtió sobre la necesidad de no cejar en las reformas y anclar la confianza de los inversores.
"El crecimiento ha sorprendido al alza y se espera un
aumento del PIB del 3,1 por ciento en 2015 y del 2,5 por ciento en 2016, significativamente por encima del promedio de la Eurozona", dijo el FMI en su informe anual preliminar sobre el país.
El Fondo, que atribuyó la mejora a las reformas estructurales pero también a las favorables condiciones externas, incluida la política expansiva del BCE, había proyectado crecimientos del 2,5 y 2,0 por ciento para 2015 y 2016 el pasado mes de abril.
En un momento en el que el panorama político parece pesar sobre la confianza inversora tras unas elecciones locales y autonómicas en las que han emergido nuevas formaciones políticas y alternativas de izquierdas, el FMI pidió esquivar tentaciones de dar marcha atrás en las reformas y, por el contrario, continuar con políticas para corregir desequilibrios.
"Una reversión de las reformas pasadas generaría incertidumbre y podría frenar la recuperación, sobre todo si el entorno exterior se deteriora", dijo el FMI para añadir que todavía persisten vulnerabilidades y problemas estructurales.
"España debería aprovechar el momento actual para llevar a cabo reformas adicionales, que tienden a ser más efectivas cuando son implementadas en un entorno altamente favorable", añadió.
El organismo también pidió reducir la deuda de empresas y familias, continuar con la disciplina fiscal y vigilar estrechamente las finanzas de las regiones para mantener la confianza de los mercados.
Tras los fuertes ajustes de los últimos años, el riesgo de desviaciones en el déficit de las Comunidades Autónomas no ha desaparecido y el FMI señaló que se debería mejorar el marco fiscal de las autonomías.
Sugirió introducir mecanismos tributarios para ayudar a financiar a las regiones e incluso permitir objetivos de déficit diferenciados para tener en cuenta las diferencias estructurales entre las comunidades.
Respecto al reformado sector financiero, la institución volvió a pedir a las autoridades que animen al sector a elevar sus activos de alta calidad y encontrar formas de reducir los costes derivados de las altas tasas de morosidad.
DESEMPLEO, ESE GRAN DESEQUILIBRIO
El FMI dijo que había margen para aplicar más medidas para fomentar la creación de empleo en un país con más de cinco millones de personas en paro, casi uno de cada cuatro trabajadores. El organismo internacional dijo que había que aprovechar la flexibilidad interna en las empresas contemplada en la reforma laboral aprobada por el Ejecutivo en 2012, y consideró fundamental vincular a medio plazo el crecimiento de los salarios con la productividad y la competitividad exterior. Además, instó a luchar contra la dualidad en el mercado laboral introduciendo un contrato único con coste de despido creciente, y pidió reducir las incertidumbres legales en los despidos colectivos para fomentar la contratación de indefinidos.
En un país en el que alrededor de un 90 por ciento del tejido empresarial está compuesto por pequeñas y medianas empresas (Pymes), el FMI consideró crítico reducir los obstáculos a estas iniciativas, apoyar la exportación y la competencia y fomentar el flujo del crédito para incrementar "el crecimiento a largo plazo y el empleo".