
El presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, considera que la decisión de continuar o no prestando ayuda a Grecia es actualmente más una cuestión de los gobiernos que de los bancos centrales y ha advertido de que el programa de compras del BCE ha causado un incremento adicional del riesgo de crédito.
"Se trata menos que nunca de una cuestión para el Eurosistema (los bancos centrales)", declaró el presidente del Bundesbank en la presentación de las cuentas anuales del banco central alemán, que vio caer un 35,6% su beneficio neto en 2014, hasta 2.954 millones de euros.
En este sentido, la institución germana apuntó que corresponde a gobiernos y parlamentos decidir si quieren incrementar más su exposición a Grecia y cubrir las necesidades de financiación del país heleno.
Por otro lado, Weidmann apuntó que, si bien los riesgos derivados del programa de compra de bonos SMP del BCE y de la refinanciación de préstamos "han disminuido", las provisiones por riesgos siguen siendo altas porque, entre otras cosas, "la decisión del Consejo de Gobierno del BCE de lanzar un nuevo programa de compra de activos da lugar a riesgos de crédito adicionales".
Así, el banquero alemán reiteró que el lanzamiento de este programa de compra de bonos soberanos conlleva que la política fiscal y monetaria pasen a estar aún "más estrechamente entrelazadas".
"Los países miembros podrían verse menos inclinados a adoptar medidas de reforma y de consolidación presupuestaria si se acostumbran a unas condiciones de financiación muy favorables", apuntó.