
Las marcas blancas y las de fabricante recogen los nuevos hábitos de los consumidores españoles. La primera se ha estancado en 2014 tras no ganar cuota de mercado, mientras que la segunda ha repuntado gracias a las promociones. Según un informe de Nielsen, la marca blanca registró el año pasado un crecimiento de sólo el 0,1% cuando en los períodos anteriores tenía incrementos por encima del punto.
"Por primera vez en 20 años, la marca blanca no ha crecido y sí la del fabricante", ha subrayado el director general de Nielsen Iberia, Gustavo Núñez, durante la presentación del estudio.
En concreto, la apuesta por la actividad promocional ha provocado que la marca blanca no ganara cuota en 2014 por primera vez en dos décadas (38,7%). Las marcas de los fabricantes vendieron en promoción en el mercado de gran consumo el 28,3% de su venta total, 1,7 puntos más que en 2013.
"El consumidor es cada vez más profesional y la marca del fabricante es la que está haciendo el gran esfuerzo y ha dinamizado la promoción. Ahora las promociones agresivas son de las grandes marcas", ha explicado el director de Nuevos Negocios de Nielsen, Alfonso Delgado.
Por otro lado, el estudio muestra que los españoles compraron el 0,7% más en 2014, debido al descenso de precios de los productos de gran consumo. Sin embargo, el conjunto del mercado, estimado en 70.000 millones de euros, repartido entre envasados (49.000 millones) y frescos (21.000 millones), cayó un 0,4%.
El descenso de los precios ha tenido como protagonista a los productos frescos. Las compras de productos se incrementaron un 0,6% en volumen de ventas, mientras que cayeron el 1,8% en su importe final.
Las compras de frutas y verduras se elevaron el 2,9% y el 1,8%, respectivamente, gracias a un descenso de precios en torno al 5%, mientras que los envasados también se abarataron de media el 0,8%, el mismo porcentaje de aumento de compra por parte de los consumidores.
Si bien se mantiene el gasto por hogar, los españoles acuden más veces a la tienda, hasta un 1,3% más que hace un año. Los consumidores consideran que controlan mejor lo que gastan y, de hecho, al comprar más veces, cada acto de compra es de menor importe, el 1,1% menos.
Gustavo Núñez ha subrayado que el nuevo consumidor español es el 'smart shopper', que tiene una "gran hipersensibilidad al precio" y sobre todo a las "promociones".
En este contexto, la actividad promocional en las tiendas se ha intensificado en línea con la tendencia manifestada por tres de cada cuatro españoles, que aseguran tener en mente las promociones cuando hace la compra.
De ellos, el 12% reconoce variar de marcas debido a las promociones, el 37% busca activamente los productos en promoción sin cambiar de tienda y, finalmente, el 24% reconoce que es "infiel" a su establecimiento habitual en función de la mejor promoción ofertada.
'Brotes verdes' en la hostelería
Los cambios de hábitos en el consumo de los españoles, con una clara 'vuelta a la madriguera', ha provocado también un descenso de las salidas y del gasto fuera del hogar a lo largo de estos últimos años.
Sin embargo, el cambio de tendencia se percibe en la hostelería, donde se notan 'brotes verdes', después de que durante la crisis desaparecieron 25.000 establecimientos hosteleros, aunque en 2014 su número se estabilizó y terminó en cifras similares a 2013, en torno a 208.000 locales.
El sector del gran consumo tiene en el 'ecommerce' una oportunidad de crecimiento y que está por desarrollar, ya que el comercio electrónico en España supone el 0,6% de las ventas totales del mercado, en línea con otros mercados maduros como Alemania e Italia, que registran un 0,5%. Sin embargo, España sigue lejos de otros países de nuestro entorno como Reino Unido y Francia, con modelos más desarrollados y cuotas del 5%.
De momento, los consumidores españoles prefieren utilizar Internet para buscar ofertas y promociones en las web de las cadenas de distribución, mientras que el 35% de los consumidores visitan las webs y, de ellos, tres de cada cuatro, buscan los mencionados descuentos.