A través de esta desinversión, que se enmarca dentro del Plan Estratégico 2008-2010 del Grupo, la Empresa se desprende de todas las participaciones que tenía en el negocio del agua
IBERDROLA ha cerrado con éxito la venta del 51% de su filial chilena de aguas Empresa de Servicios Sanitarios de Los Lagos S.A. (ESSAL) por 103,3 millones € a la compañía Aguas Andinas, filial de la española Aguas de Barcelona, operador de referencia mundial en el sector del agua.
La Compañía, que llegó a un principio de acuerdo con Aguas Andinas a finales del pasado mes de marzo, ha concluido una operación gracias a la cual se desprende definitivamente de todas las participaciones que tenía en el negocio del agua.
La venta se ha hecho efectiva una vez culminada la Oferta Pública de Acciones (OPA) lanzada por la mencionada filial de Aguas de Barcelona por el 100% de ESSAL a raíz del acuerdo alcanzado con IBERDROLA.
La transacción de este paquete accionarial de ESSAL, cuyo beneficio neto el pasado ejercicio ascendió a 9,3 millones €, se ha efectuado a un ratio Enterprise value / Ebitda superior a 11, en línea con el de las últimas operaciones llevadas a cabo en el sector sanitario chileno.
Cabe recordar que IBERDROLA entró en el capital de esta empresa de aguas en 1999, tras adquirir una participación del 51% a la Corporación de Fomento, dependiente del Ministerio de Industria chileno. ESSAL cuenta a día de hoy con 173.000 clientes y 328 empleados, y presta sus servicios a 33 localidades de las regiones Décima y Décimo Cuarta.
La Compañía enmarca esta operación dentro de su Plan Estratégico 2008-2010, que contempla desinversiones por más de 3.000 millones € por la venta de diversas participaciones en negocios considerados no básicos.
En esta línea, cabe reseñar que IBERDROLA ha obtenido a lo largo del primer trimestre de 2008 unas plusvalías de 535,9 millones €, más elevadas que las inicialmente estimadas, por la venta de, entre otras participaciones, el 4% de la portuguesa GALP.
La estrategia de la Empresa para los próximos tres ejercicios contempla el comienzo de un nuevo ciclo inversor, en el marco del cual prevé destinar alrededor de 25.000 millones € a crecer en el negocio energético básico, tanto en España como en el extranjero.
Como consecuencia de las inversiones y del progresivo incremento de la eficiencia, IBERDROLA espera más que duplicar las principales magnitudes de su cuenta de resultados en 2010: está previsto que el beneficio neto supere los 3.500 millones €, cifra que supondrá multiplicar por 2,1 los 1.660 millones € obtenidos al cierre de 2006.
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