Martinsa Fadesa estudiará solicitar su liquidación en una reunión extraordinaria de su consejo de administración convocada para la mañana de este lunes, 2 de marzo, después de que esta pasada semana no prosperara el último convenio de acreedores presentado por la inmobiliaria al no lograr el suficiente respaldo de los bancos.
La compañía que controla y preside Fernando Martín afronta así su liquidación cuatro años después de que en marzo de 2011 lograra superar el mayor concurso de acreedores de la historia. La falta de liquidez de la empresa para atender al calendario de pagos de deuda que fijó el convenio con el que emergió de ese concurso ha llevado a la empresa a plantear una reforma del mismo que finalmente no ha prosperado.
Martinsa analiza su liquidación tras cerrar el ejercicio 2014 con un 'agujero patrimonial' de 4.603 millones de euros, según el informe de resultados del pasado año remitido por la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Según este informe, la inmobiliaria cuenta con activos valorados en 2.392 millones de euros para hacer frente a un pasivo total de 6.995 millones de euros, de los que 3.200 millones corresponden a deuda con entidades financieras.
Asimismo, la compañía saldó el pasado ejercicio con 'números rojos' de 331 millones de euros, la mitad respecto a los contabilizados un año antes, a pesar de incluir gastos financieros de 130 millones de euros derivados de la deuda concursal que aún arrastra.
Martinsa logró no obstante aumentar su facturación, un 18,3% hasta los 130 millones de euros, gracias a que durante el pasado año entregó y escrituró 1.585 viviendas, el 30% de ellas (482 pisos) en España.
Además de en España, Martinsa Fadesa cuenta con actividad en Francia, Marruecos, México, Rumanía, Polonia, República Checa y Bulgaria, si bien esta última también está en liquidación. Todas las viviendas prevendidas al pasado año corresponden a esta actividad internacional.
La banca se repartirá sus activos
