
El Gobierno francés ha asegurado que va a posponer el incremento en las tarifas de las autopistas de peaje que iba a entrar en vigor en febrero, pendiente de las conclusiones de un grupo de trabajo parlamentario que revisará el futuro de las concesiones.
El Gobierno socialista, necesitado de fondos, quiere revisar los contratos con las concesionarias de autopistas, privatizadas por el gobierno anterior y que considera demasiado generosos. Además quiere crear un nuevo regulador que supervise las vías de peaje.
En función del IPC
El Estado francés fija cada año incrementos de tarifas consultados con las operadoras y en función del IPC y las inversiones. Se esperaba una subida de los peajes del 1,07% a partir del 1 de febrero.