WASHINGTON (Reuters) - Muchos países se enfrentarán a un serio problema en su balanza de pagos si los precios de los alimentos y los combustibles se mantienen en los niveles actuales o suben aún más, advirtió el martes el FMI, al afirmar que la inflación se está volviendo una cuestión más difícil de la esperada.
En un informe sobre el impacto de los elevados precios de los alimentos y los combustibles, el FMI dijo que hasta hacepoco los efectos en la balanza de pagos habían sido limitados, pero ahora se observaba un mayor impacto y la inflaciónestá poniendo a los presupuestos estatales bajo una fuerte tensión.
Además, el fondo explicó que los precios del petróleo y los alimentos podrían suavizarse ligeramente a medida que elsuministro aumente, aunque hay mucha incertidumbre en el futuro.
"Las alzas de los precios de los alimentos y combustibles han aumentado notablemente los desafíos de políticaasociados con reducir la pobreza, garantizar la seguridad alimentaria y mantener la estabilidad macroeconómica", subrayóel FMI.
La institución aconsejó a los países que lo primero es proteger a los pobres, aumentando los programas sociales sinponer en riesgo la estabilidad económica, y segundo, observar las medidas de política económica que serán efectivas amedio plazo.
En su informe, el FMI dijo que había espacio en algunos países para aflojar sus posturas fiscales, pero que otrospodrían necesitar limitar su respuesta o buscar ayuda externa.
El fondo indicó que los denominados efectos de primera ronda de los altos precios sobre la inflación deberían sergeneralmente expansivos y que la política monetaria debería buscar evitar que los precios de otros bienes y serviciostiendan a subir más.*.
